Las obras que Adif está realizando en Roda de Berà que empezaron el 1 de octubre se han convertido en un auténtico dolor de cabeza para el Ayuntamiento y, sobre todo, para los vecinos.
Mientras que algunos rodenses que residen en urbanizaciones de la playa lamentan «ruidos y desperfectos» por culpa de los trabajos, desde el consistorio van más allá y explican que se han presentado reclamaciones a la empresa constructora por un gran número de desperfectos en la vía pública. Concretamente, «unas 75 reclamaciones», tal y como destaca el alcalde, un Pere Virgili que ha demostrado su entera solidaridad con los vecinos del pueblo y les ha tendido la mano para ir juntos contra todo aquello que les haya perjudicado.

En cuanto a desperfectos en la vía pública, Virgili ha destacado que «antes de comenzar las obras realizamos un reportaje fotográfico para que quedase constancia de cómo estaban las calles. Reconozco que algunas calles ya tenían desperfectos, pero queremos que nos las dejen, al menos, como estaban, no peor». Virgili ha hecho estas declaraciones en una comparecencia de prensa a pie de calle, en la plaza René Vandermeuter, en el punto donde se están llevando a cabo los trabajos en las vías.
El alcalde ha anunciado que «hace unas tres semanas pasamos un listado de las vías que estaban afectadas y ahora tenemos que ver qué acaba arreglando la empresa adjudicataria. «Mañana sabremos si nos repararán los daños o no y qué puntos o zonas reparan», ha remarcado. En este sentido, se ha mostrado tajante: «Queremos que nos dejen las calles como estaban».
Adif y las obras
Virgili tiene claro que los pasos de Adif no han sido los adecuados con Roda de Berà. «Ya hemos hecho varias visitas de obras. Sabemos qué se está haciendo allí, pero no cómo se está haciendo y cómo se puede hacer para afectar lo mínimo a los vecinos de Roda». En este sentido, ha destacado que «hace ya varias semanas que pedimos una reunión técnica, donde pedimos que afectados como vecinos, campings o la residencia del Banco de España nos acompañasen, para que nos explicasen qué iban a hacer y cómo lo iban a hacer». El resultado, según Pere Virgili, han sido «excusas y más excusas hasta que ayer por la tarde nos desconvocaron una reunión que teníamos prevista para hoy. El motivo que nos dieron fue que las obras estaban muy adelantadas ya». «Nos sentimos menospreciados por Adif», asegura, tajante.
Todas estas explicaciones las dio Virgili enmedio de un ruido más que molesto que se sentía desde una rotonda que está ubicada a unos 50-60 metros de uno de los puntos donde estaban trabajando los operarios. «Los que más lo están sufriendo todo son los vecinos y necesitamos que minimicen los ruidos, pero el problema es que los operarios están trabajando durante tres turnos y esta situación hace inviable poder vivir tranquilamente en algunos puntos».
Por su parte, Adif ha asegurado al Diari que ya trasladó al Ayuntamiento de Roda el compromiso de reponer los viales afectados cuando acaben las obras del túnel. En cuanto a las afectaciones a particulares afirma que no tiene constancia oficial de que las haya.
En otro orden de cosas, el diputado de Sumar Fèlix Alonso ha remitido este jueves varias preguntas al Congreso de los Diputados referente a la problemática en Roda. Alonso cuestiona los motivos de la no reunión entre Roda y Adif, pese a que esta estaba prevista; si habrá nuevas reuniones; si se desplazarán técnicos al municipio para valorar desperfectos; si implantará medidas para solucionar los problemas de ruido, polvo u otros; y cuándo se podrán reparar los desperfectos.
Quejas vecinales
Han sido más de veinte los vecinos que han acudido a la comparecencia del alcalde, aunque este ha detallado que, de momento, no hay un gran número de reclamaciones por culpa de las obras. «Hay algunos vecinos que han tramitado quejas al Ayuntamiento y otros que me las han hecho llegar a mí personalmente, porque me conocen. Diría que son unas cuatro o cinco entre grietas y ruidos». Para ayudarles, ha apostado por «invitar a todos los perjudicados que nos envíen quejas a nosotros. Entiendo las quejas en las redes sociales, pero deberían ir un poco más allá, mejor quejas formales».
Virgili ha recordado a los afectados que Adif, responsable de los trabajos, es quien tiene que solucionar las reclamaciones y, llegado el caso, reparar los desperfectos. Por ello, ha detallado que «en la página web de Adif hay un link donde se pueden tramitar las quejas. Si la empresa lo considera, envía un perito a casa, este comprueba que las grietas estén producidas por las obras que ellos están realizando y, a partir de aquí, el seguro de la empresa constructora puede hacerse cargo o no».
En cuanto a días puntuales problemáticos por culpa de las obras, ha puntualizado que «hemos tenido dos episodios muy importantes. Uno, del 15 de noviembre, cuando hicieron un trabajo sobre la base del túnel y vi como el móvil de un vecino del Roc de San Gaietà temblaba y se movía por los temblores. Otro, recientemente, que molestó mucho por el ruido».
Hablan los vecinos
Conxita Veiga, una de las vecinas afectadas, ha lamentado que «en mi casa se han producido algunos episodios desagradables. Me han aparecido grietas en varias habitaciones y también se han caído objetos y se han roto otros». Ella vive a escasos veinte metros de donde se están llevando a cabo los trabajos, en el número 1 de la plaça del Mediterrani.
«Se nos han roto cuadros, cristales de cuadros, algunos botes en los lavabos...» son otros de los problemas que ha sufrido esta vecina, que también detalla que «a una vecina se le ha desprendido la parte exterior del extractor. Hacía un mes y medio que no venía a casa y se lo encontró hace poco, cuando regresó a casa».

Según Veiga, los daños no solo se limitan a la vivienda, sino que su coche también ha sido víctima de las obras del túnel: «En la puerta trasera tengo una rayada y también un bollo, todo producto del las piedras que saltaban». Esas piedras, según Conxita Veiga, «también nos han roto un grifo exterior del edificio». «No sé si limpiarán el parking o no, pero lo han dejado mal, aunque lo que más nos preocupa son las grietas».
«Queremos que nos escuchen y que nos reparen los daños, no hay derecho», ha lamentado.
Esther Valls también se acercó a la comparecencia del alcalde apuntó que «los temblores han llegado a ser terribles en algunos momentos y ruidos nocturnos hasta altas horas de la madrugada». Ella es la secretaria de la Asociación de Vecinos Costa Dorada y aseguró que teme «todas las consecuencias de las obras, así como la tala de árboles. Para que lo entendáis, es como la película de Avatar. Hemos sufrido una tala indiscriminada de árboles». «Los vecinos, además, debemos estar formados sobre cómo tenemos que actuar ante accidentes químicos. Protecció Civil de la Generalitat vino a hacer una charla y muchos vecinos estamos preocupados por qué pasará cuando circulen los trenes, si tendremos que irnos y quién nos comprará nuestras casas».
Tambén vive en la calle Pineda otra vecina que lamentaba que «nuestra calle es una vía de paso de mucha gente y que a nadie se ocurra cruzarla con bambas ni pasear al perro, ya que es muy peligroso». A esto, Pere Virgili respondía que «intentaremos que Adif y la empresa que se encarga de las obras puedan arreglar la calle y que sea transitable con cierta normalidad».
Los campings
Otro de los colectivos más afectados por las obras del túnel de Roda de Berà son los campings. Hasta 16 están en el trayecto que hay desde Sant Vicenç de Calders a Tarragona y todos ellos reclaman también que el incremento de paso de trenes que se producirá les afectará negativamente.
Pere Parera es el propietario del camping Stel de Roda de Berà y aprovechó para lamentar la situación que están sufriendo. Pese a que «nosotros no tenemos grietas, pero estamos luchando para que nos instalen barreras fónicas —elemento que sirve para frenar o minimizar el paso del sonido—, pero no nos lo aceptan porque los campings no constan como zonas residenciales». «Nos encontrados completamente indefensos, ya que en verano, que es cuando tenemos la máxima actividad, estaremos desprotegidos».
