Justo un año después de poner en marcha la licitación, el Ministerio para la Transición Ecológica ha formalizado finalmente el contrato para ejecutar la transformación del paseo marítimo de La Pineda. Una actuación que debe servir para eliminar la carretera que pasa por primera línea de mar e incrementar la amplitud de la playa, con nuevos espacios renaturalizados para los peatones. A pesar de que la intención era arrancar los trabajos de forma inminente, finalmente las máquinas no empezarán a demoler el paseo hasta septiembre.
Así lo han acordado técnicos del servicio de Costas del ministerio y del Ayuntamiento de Vila-seca, con la intención de interferir lo mínimo posible en los meses de mayor actividad de la temporada turística. Cabe recordar que las obras tienen una duración prevista de doce meses, con lo que el nuevo aspecto del paseo podría retrasarse hasta después del verano de 2025.
Las obras de transformación del paseo contemplan la supresión de las aceras, los dos carriles de circulación y la línea de aparcamientos que pasan actualmente por primera línea desde la calle Hipòlit Lázaro hasta el límite con Cap Salou.
De esta forma se ampliará la playa para crear un sistema de dunas que facilite la regeneración natural de la arena. Asimismo, se generarán nuevas áreas de paseo y zonas verdes frente al mar y se renovarán por completo tanto el mobiliario urbano como el sistema de iluminación.
El proyecto prevé que se instalen en este ámbito nuevos aparatos de fitness, parques infantiles, diferentes estructuras a modo de tumbona y otros elementos de carácter lúdico y deportivo. En cuanto a la circulación rodada, el paso de vehículos se limitará a la franja más próxima a las edificaciones, donde se reparará todo el asfalto y se hará una nueva acera.
Desde el pasado mes de septiembre se conoce la UTE que se encargará de las obras, formada por las empresas Lantania, Garcia Riera y El Ejidillo Viveros Integrales. En un principio, la intención del Ministerio era que pudieran empezar a trabajar antes de acabar 2023 para tener listo el nuevo paseo de cara a la temporada 2025. Sin embargo, la tramitación de la adjudicación se ha demorado más de la cuenta al tratarse de una obra financiada con fondos Next Generation. El coste de esta actuación asciende a 7,2 millones de euros, 4 de ellos aportados por la Unión Europea.
Iluminación y renaturalización
En paralelo al proyecto del Ministerio, el Ayuntamiento de Vila-seca ya ha adjudicado dos obras que buscan renovar el aspecto del paseo marítimo de La Pineda, en este caso en la mitad que va desde la calle Hipòlit Lázaro en dirección a Tarragona. En este tramo, se renovará completamente el sistema de iluminación y se instalará fibra óptica. Además, se prevé la plantación de más de 21.000 especies vegetales para renaturalizar diferentes espacios públicos y tramos de playa. Desde el consistorio señalan que la previsión es acometer estas dos actuaciones a partir de septiembre.
Se trata de dos obras que también cuentan con financiación Next Generation, a través de los Planes de Sostenibilidad Turística en Destinos. La inversión en este caso supera los 1,6 millones de euros.