El Gobierno dio luz ayer a un real decreto ley con nuevas medidas para hacer frente al impacto de la guerra de Ucrania en la economía, entre las que destaca la eliminación del Impuesto del Valor Añadido (IVA) en los alimentos de primera necesidad y su rebaja a la mitad, del 10% al 5%, en aceites y pastas.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció personalmente las principales novedades de este tercer paquete de ayudas, que en esta ocasión está centrado en contener los precios de vivienda y alimentos, y que incluye también un cheque de 200 euros para familias vulnerables, con hasta 27.000 euros de renta anual, con el objetivo de llegar a 4,2 millones de hogares.
La supresión temporal del IVA, que entrará en vigor el 1 de enero y se extenderá durante seis meses, afecta a alimentos de primera necesidad como el pan, las harinas panificables, la leche, el queso, los huevos, las frutas, las verduras, las hortalizas, las legumbres, las patatas y los cereales, productos que en algunos casos acumulan subidas anuales de más del 30 %.
El presidente también anunció 300 millones en ayudas directas a los agricultores para compensar el aumento de los costes por el encarecimiento de los fertilizantes y aseguró que se incluirán medidas para que estas ayudas se trasladen de «manera directa e inmediata» a los precios de los alimentos.
Sánchez, que cifró en más de 10.000 millones de euros el coste de las nuevas medidas que elevan a 45.000 el impacto de lo aprobado durante este año, incidió en el esfuerzo del Gobierno para «proteger a la clase media ante el aumento del coste de la vida, de la energía y de los alimentos».
Contratos de alquiler
Otra de las novedades del real decreto ley aprobado ayer por el Consejo de Ministros –que debe entrar en vigor el próximo 1 de enero tras el vencimiento el 31 de diciembre de las medidas vigentes– es que durante los próximos seis meses se prorrogan las condiciones de los contratos de alquiler en su renovación.
Esta medida, negociada hasta el último momento entre los socios del Gobierno, se suma a la extensión hasta el 31 de diciembre del límite del 2 % a la actualización anual del precio del alquiler.
La ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030 y líder de Podemos, Ione Belarra, se felicitó por las medidas aprobadas por el Gobierno tras una negociación entre los socios «muy difícil», y en la que Podemos, sostiene, consiguió la prórroga automática de los contratos de alquiler.
También se prorroga durante seis meses la rebaja a los impuestos de la electricidad y el gas, y la congelación de precio máximo de la bombona de butano.
En cuanto a los carburantes, el Gobierno pondrá fin el 31 de diciembre al descuento obligatorio de 20 céntimos por litro de combustible –gasolina y gasóleo– para todos los consumidores, como estaba vigente hasta ahora para contener el alza del carburante, y lo mantendrá para los transportistas por carretera.
Para los agricultores, habrá una ayuda directa de hasta 20 céntimos por litro, mediante la devolución del impuesto especial de hidrocarburos, una medida que tiene un coste de 240 millones de euros. Además, para los pescadores se concederán 120 millones en ayudas directas para ayudarles a afrontar el precio de los carburantes.
Sánchez saca pecho
Sánchez defendió el éxito de las medidas adoptadas hasta ahora y que han permitido que España sea el país de la UE con menor inflación, que en noviembre se moderó al 6,8%, aunque con los precios de los alimentos en máximos, con un alza del 15,3 %.
En este sentido, incidió en el papel de España en Bruselas, donde «ha defendido, desde antes de la guerra, la intervención de un mercado que no estaba funcionando, como es el energético». Para el líder del Ejecutivo, el tiempo les ha dado la razón, «porque la solución ibérica y el acuerdo de los ministros de Energía de poner un limite al precio del gas va a permitir navegar con una mayor certidumbre por la tempestad de la guerra de (el presidente de Rusia, Vladimir) Putin». Así, celebró el funcionamiento del mecanismo ibérico en España y Portugal, que limita el precio del gas destinado a la generación eléctrica, una solución que ahora reclaman «muchos gobiernos europeos».
Tras el anuncio de las medidas, el sector agrario dio la bienvenida a la supresión del IVA, según las organizaciones agrarias Asaja, COAG y UPA, aunque ésta última señaló que hubiese sido conveniente reducir este impuesto también para la carne y el pescado. Y desde la oposición, el PP consideró que las medidas se quedan «cortas» y llegan «tarde» porque, por ejemplo, se «copia» tres meses después la propuesta de Alberto Núñez Feijóo de reducir el IVA de los alimentos básicos. Por su parte, el presidente Sánchez dijo que confía en que «gobernar para la gente» tenga repercusión electoral.