El Gimnàstic de Tarragona ya tiene vía libre para trasladar en breve su fútbol base al Anillo Mediterráneo de Campclar. El Ayuntamiento publicó ayer en su sede electrónica el acuerdo que el gobierno municipal (ERC-Junts per Tarragona-CUP) materializó el pasado 22 de septiembre para adjudicar la gestión de seis fincas públicas en favor del club grana para los próximos cincuenta años, dando de esta forma un paso casi definitivo para que la entidad de la Budellera pueda construir su nueva Ciutat Esportiva en el entorno de Ponent.
En el acuerdo del ejecutivo de la Plaça de la Font se establece que la corporación local realiza una adjudicación de forma directa en favor del Gimnàstic porque se trata de una entidad «sin ánimo de lucro y que está declarada de utilidad pública», a cambio del pago de un canon anual de 76.937 euros anuales. En global, el futuro recinto deportivo ocupará una superficie de 47.000 metros cuadrados y se ubicará en la zona donde se habilitó el aparcamiento durante los Juegos del Mediterráneo de 2018.
Tres campos con casetas
El presidente del Gimnàstic, Josep Maria Andreu, destacó ayer que el paso dado es «una buena noticia». El máximo representante de la entidad grana recalca que el club «lo tiene todo a punto» para iniciar las obras. «Si las podemos empezar en octubre o noviembre, en dos meses podemos hacer el traslado del fútbol base», indicó ayer en declaraciones a este periódico. Este calendario se traduciría en el hecho de que los 600 jóvenes que defienden los colores del Nàstic en todas sus categorías inferiores podrían trasladarse a Campclar entre diciembre y enero de 2023.
Según se detalla en el proyecto de la primera fase de la Ciutat Esportiva, la inversión prevista es de 1,5 millones de euros para llevar a cabo el movimiento de tierras, urbanizar el entorno y habilitar dos campos de fútbol de césped artificial aptos para fútbol 11, así como otro medio campo para fútbol 7. «El objetivo es poder dar respuesta a las necesidades actuales del club a corto plazo para disponer de un equipamiento adecuado para entrenar y celebrar eventos deportivos de todas las categorías del club», se recalca en el proyecto. Asimismo, también se adecuarán casetas para complementar la actividad diaria.
Tendrá «uso ciudadano»
Por su parte, desde el Ayuntamiento también se valoró la operación de manera positiva. «Es una gran noticia. Culminamos un camino que ha sido tortuoso que, por suerte, acaba bien», indicó ayer al Diari el concejal de Territori, Xavier Puig (ERC), quien añadía que la próxima llegada del Nàstic a Campclar «potenciará mucho el polo deportivo del Anillo Mediterráneo».
Asimismo, cabe destacar que las nuevas instalaciones también podrán ser usadas por parte de toda la ciudadanía, más allá de los socios grana. «El concesionario debe reservar el uso gratuito del espacio en favor del Ayuntamiento, cuando así lo requiera, para desarrollar cualquier actividad fundamentada en el interés público», se afirma en la cláusula 23 de la adjudicación. ¿Qué quiere decir esto? «El concesionario (el Nàstic) debe llevar a cabo anualmente la realización de programas o actividades para toda la ciudadanía derivados del plan funcional en ámbitos como el deportivo/educación, deporte/salud, deporte/cohesión social/, deporte/formación y deporte / promoción turística y cultural de la ciudad», se añade en el contrato.
Esto se traduce en el hecho de que en la futura Ciutat Esportiva se podrían organizar actividades se como Casals Esportius o campus y actividades de alimentación saludable. En el ámbito de cohesión social se plantearía la opción de impulsar iniciativas en favor de la igualdad de género en el deporte o, en la formación, realizar actividades de perfeccionamiento y tecnificación de fútbol deportivo, así como albergar eventos o competiciones deportivas de fútbol base.
La adjudicación obliga al Nàstic a reservar el uso gratuito del recinto para el Patronat d’Esports