El Govern de la Generalitat ha impulsado una regulación que, si es aprobada por el Parlament, impondrá la obligación de renovar las licencias de pisos turísticos cada cinco años a través de un permiso que será emitido por los ayuntamientos.
La normativa tendrá efecto en 262 municipios que concentran 95.000 viviendas de uso turístico en toda Catalunya. En la demarcación de Tarragona, repercutirá en 34 localidades que acumulan un total de 28.764 inmuebles –un 94% de todos los que tienen licencia actualmente– cuyo permiso dejará de ser perpetuo.
«De esta forma, están cargándose el sector», Joan Calvet, presidente de la Associació d’Apartaments Turístics de la Costa Daurada i les Terres de l’Ebre
Actualmente, los pisos turísticos solo deben registrarse con una cédula de habilidad y demostrar que están amueblados y que no se alquilan por habitaciones, todo a través de una declaración responsable ante Turismo.
Esta normativa endurecerá de forma significativa los trámites para los apartamentos turísticos que existen en Tarragona y en toda Catalunya, ya que, en los próximos cinco años, serán las corporaciones locales las que deberán decidir cuántos pisos permiten y si renuevan los títulos actuales.
Entre los municipios con exceso de pisos turísticos están Salou, Cambrils y Mont-roig
Si el municipio en el que se encuentra el apartamento no documenta que hay suelo suficiente para garantizar el acceso a la vivienda, aquel inmueble deberá cesar la actividad una vez pasados los cinco años. En el caso de que la persona propietaria justificara una inversión en el piso, podría prorrogar la licencia un lustro más.
Por otra parte, también se impondrá una limitación: no podrá haber más de diez viviendas de uso turístico por cada cien habitantes, un tope que se supera en 47 poblaciones de toda Catalunya, donde la norma obligará a eliminar, en conjunto, unos 28.000 pisos turísticos, que representan un 27% del total de viviendas destinadas a este uso que hay en todo el territorio.
«Está en la línea de lo que hemos trabajado en TGN durante estos últimos meses», Nacho García, conseller d’Habitatge del Ayuntamiento de TGN
En la demarcación de Tarragona, son ocho las localidades que superan esta limitación de hasta diez pisos por cada cien habitantes: Salou, Cambrils, Mont-roig del Camp, Pratdip, Margalef, La Vilella Baixa, L’Ametlla de Mar y L’Ampolla. Detrás de la nueva legislación, se busca acabar con el monopolio y la especulación en este sentido que, según el Govern, se ha desarrollado desordenadamente.
«Lo analizaremos bien, pero ceder la responsabilidad a los municipios puede generar algunas desigualdades», Pere Granados, alcalde de Salou
El alcalde de Salou –el municipio de la demarcación con más pisos turísticos–, Pere Granados, expone que el gobierno municipal analizará con detenimiento la nueva regulación: «El Govern de la Generalitat tiene la obligación de garantizar una igualdad en todo el territorio catalán y, por lo tanto, ceder la responsabilidad a los municipios puede generar desigualdades en función de la localidad en la que tengas tu propiedad». Sobre esto, Manuel Sosa, abogado, experto inmobiliario y administrador de fincas, comenta que «los ayuntamientos son los que mejor conocen la realidad de su municipio».
«Los pisos turísticos están expulsando a habitantes de barrios de toda la vida», Manuel Sosa, abogado, experto inmobiliario y administrador de fincas
Aunque el tope se sitúe en un máximo de un 10% de pisos por habitantes, a partir de cinco viviendas por cada cien ciudadanos, Territori ya considera que hay una «concentración excesiva» que pone en riesgo el equilibrio social y empuja al alza el precio de la vivienda. En Catalunya, son 134 las localidades que están en esta situación. En la demarcación, hay 22, entre las cuales destacan Vila-seca, Altafulla o Deltebre.
En esta línea, el concejal d’Habitatge del Ayuntamiento de Tarragona, Nacho García, valora positivamente el anuncio: «De entrada, nos suena bien, ya que es lo que llevamos trabajando en Tarragona desde hace unos meses». «Tenemos que estudiarlo bien y con detenimiento, pero creemos que es una parte de la solución al problema de las viviendas de uso turístico; no obstante, seguiremos tramitando la regulación en la que hemos trabajado», añade.
La ejecución de la nueva normativa supondría la eliminación del 27% de pisos en Catalunya
En los últimos años, ha habido 85 municipios que han tramitado, de una u otra manera, algún tipo de iniciativa urbanística de regulación. A partir de ahora, si se aprueba el decreto ley, tener un piso turístico sin la licencia se considerará una infracción urbanística sujeta a «sanciones graves», de la misma manera que puede serlo un vertido ilegal o construir sobre suelo no urbanizable.
Sosa expone que está de acuerdo con las nuevas reglas: «Me parece bien desde el punto de vista de los residentes en las comunidades de vecinos, ya que los pisos turísticos están invadiendo cada vez más los edificios residenciales y expulsando a los habitantes de sus barrios de toda la vida».
«Hacía falta mejorar la legislación existente en Catalunya; muchas ciudades europeas ya están en esta línea, ahora hay que ver cómo se desarrolla todo», Antonio Russo, doctor en Economia por la URV y profesor del Departament de Geografia
En la misma línea se muestra Antonio Russo, doctor en Economia por la Universitat Rovira i Virgili (URV) y profesor del Departament de Geografia: «Es algo que hacía falta para mejorar la legislación que había en Catalunya; muchas ciudades europeas ya están en esta línea». «Hay que ver de qué manera se desarrolla todo», añade.
¿Qué dice la patronal?
El presidente de la Associació d’Apartaments Turístics de la Costa Daurada i les Terres de l’Ebre, Joan Calvet, expresa que «se han cargado el sector». «En Catalunya, se irán al paro a 24.000 personas; somos mil pymes y el 42% del turismo», añade. En este sentido, también manifiesta que la afectación se extendería: «Comercio y restauración se verían afectados».
Restará ver hasta dónde llega esta normativa y si termina por ratificarse, pero, por el momento, parece que no ha dejado indiferente a nadie, algo que era de esperar, ya que los pisos turísticos llevan mucho tiempo en la agenda mediática y política.