Ya es oficial. El pleno municipal del Ayuntamiento de Tarragona ha aprobado este viernes, con el apoyo de 18 de los 27 concejales del Saló de Plens, iniciar el proceso para concesionar el uso del almacén 5 de la Tabacalera para destinarlo a un centro formativo.
La iniciativa, propuesta por el gobierno del PSC, ha contado con el 66% de los votos, al recibir el OK de Esquerra Republicana y Junts per Catalunya, mientras que ECP se ha alineado con PP y Vox para rechazar la iniciativa.
Durante los últimos meses se ha especulado con el interés de la Escola Universitària de la Salut i de l’Esport (Euses) para implantar en la Tabacalera el grado de Ciències de l’Activitat Física i de l’Esport (CAFE), que en la actualidad ya ejerce como centro adscrito a la Universitat Rovira i Virgili (URV) en las instalaciones ubicadas en Amposta.
La operación, que se centrará en un espacio de 2.864 metros cuadrados, contempla una concesión del espacio para cuarenta años, así como que la inversión necesaria para adecuar el inmueble –unos 4,6 millones– las asuma el concesionario, que tendrá un margen de 20 años para amortizar la inversión, a cambio de abonar un canon anual de 212.000 euros a partir del año 21.
«El primer paso»
El alcalde de Tarragona, Rubén Viñuales (PSC), ha destacado que, con la aprobación, «se da el primer paso para recuperar un espacio emblemático» y «no estar 40 años más esperando».
Por su parte, ERC ha apoyado el punto del orden del dia porque «por primera vez en el pleno hablamos de la Tabacalera para dar una solución, una solución que no es que ERC apoye, es que esta propuesta ya se está trabajando desde el mandato anterior, por tanto es una continuidad que celebramos».
En la misma línea se ha expresado Jordi Sendra (Junts), quien reitera que el consistorio «no puede pagarlo todo», a la vez que la operación «rompe con una dinámica de 20 años para reforzar el hub cultural».
Por su parte, mucho más crítico se muestra Jordi Collado (ECP), quien pone en duda de que el recinto albergue un grado universitario. «La empresa que ha pedido la cesión, que lo hace para 20 años y no 40, solo tiene un título. ¿Dejará Amposta?», critica el edil, quien reitera que «la URV no sabe nada de todo esto».
Finalmente, Maria Mercè Martorell (PP) critica que «la Tabacalera sea un cajón de sastre y no haya un plan global», y pone en tela de juicio que la inversión sea de 4,6 millones de euros. «La concesión es larguísima, ¿qué pasará si la empresa se va a los 20 años? No pagarán nada?», se ha preguntado, mientras que Javier Gómex (Vox) denuncia que la operación «es una cesión gratuita encubierta».