Más de 200 alumnos de instituto expectantes. Ante ellos, un grupo de compañeros que se caracterizan como romanos y narradores, y les explican como eran las ciudades en la Antigua Roma. Lo hacen como punto y final a todo un proceso de búsqueda de información, visitas a museos y lugares de interés, elaboración de un guión y los ensayos. Se trata de la propuesta ‘Veïns de Roma’, del Institut Vidal i Barraquer.
Pero también es una apuesta por el futuro. Un festival de reconstrucción histórica como Tarraco Viva no habría llegado a la vigesimoquinta edición de no ser por la obsesión de su organización de atraer a los más jóvenes con un gancho tan interesante como la historia. Así de fácil y con estos resultados.
Con este objetivo nació el proyecto educativo y social de Tarraco Viva, que engloba una diversidad de actos a lo largo de las dos semanas que dura el festival. Actividades educativas dirigidas a los centros educativos, por una parte, y actividades familiares que fomentan la integración y la participación de todo el mundo en el festival, de otra. Se trata, como explican desde la organización, de una de «las líneas estratégicas del festival», y por eso han querido darle un nuevo impulso en esta 25ª edición.
‘Veïns de Roma’ de los alumnos de Batxillerat i Cicles Formatius del Vidal i Barraquer, el pasado martes, fue el primer acto dentro de la programación, donde también destaca ‘Ludi Constantinenses’, un gran encuentro de alumnos de las asignaturas de Llatí y Grec de 4º de la ESO y de once institutos diferentes de la provincia. Esto fue ayer por la mañana en la Vila de Centcelles de Constantí, y consiguió atraer más de 200 participantes en un entorno patrimonial, todo un logro. O, por ejemplo, ‘Un dia a Tàrraco’, el viernes de la semana que viene, que se presenta como una propuesta renovada esta edición y con el objetivo de juntar alumnos de la ESO y de Batxillerat para compartir una jornada educativa en Passeig Arqueològic, el Amfiteatre y el auditorio del Camp de Mart. Esta será la actividad más multitudinaria del ámbito educativo.
El aspecto social e integrador
Dentro del aspecto social de Tarraco Viva, con la intención de integrar diversos colectivos en el festival, aparece este año ‘Matins en família’ como novedad, la mañana del domingo 21 de mayo, o la inclusión de las bibliotecas públicas de la ciudad en la programación habitual y ofreciendo actividades de lectura y de integración, en especial la Biblioteca Pepita Ferrer de Torreforta. La misión del aspecto social, en palabras del director de Tarraco Viva, Magí Seritjol, es «contribuir a la cohesión social mediante la equidad, la educación intercultural y el uso del catalán».
«La voluntad es la que tiene que tener cualquier festival: la de acercar cuantos más colectivos mejor», dice Seritjol sobre la apuesta educativa y cultural de Tarraco Viva. Después de tantos años apostando por el futuro en forma de jóvenes y niños, el director se muestra satisfecho del resultado, y concluye: «Sin relevo generacional no iremos a ninguna parte, estaríamos perdidos; ¿para quién es el patrimonio?».
