Cruïlla Hivern celebra el éxito del ciclo con 31.115 asistentes y 7 conciertos con entradas agotadas.
En esta segunda edición de la propuesta, que ha tenido lugar del 11 de enero al 15 de marzo, se ha podido disfrutar de un cartel con grandes nombres locales e internacionales y de música variada para todos los gustos, como ya es inherente a la marca Cruïlla.
El pistoletazo de salida del primer concierto del año lo dio Maria Becerra, que encendió un Sant Jordi Club con un repertorio lleno de éxitos que todos cantaron palabra por palabra.
A continuación fue el turno de Depedro y Flashy Ice Cream, que en una misma noche llenaron dos salas de Barcelona: el primero presentando un emocionante ‘Lugar perfecto’ y los segundos irradiando una energía inmensa en un concierto lleno de invitados de primera línea de la música urbana en catalán.

Cerraron el mes de enero La Habitación Roja, con un viaje por sus veinticinco años de trayectoria, y un desbordado Sant Jordi Club con las barras crudas y la voz descarnada de Hard GZ.
También pasaron por el Cruïlla Hivern, y no una sino dos veces, los catalanes Sidonie, que comenzaron el mes de enero con dos grandes conciertos. Una noche en un íntimo Heliogàbal lleno hasta los topes y otra en el Sant Jordi Club, que cautivó a todos y cada uno de los asistentes.
Una semana más tarde y en el mismo lugar, Dani Fernández hizo bailar y emocionó a un público entregado que ya había agotado las entradas meses antes, presentando su nuevo proyecto ‘La Jauría’.
Quien también hizo un doblete dentro del ciclo fueron los de Vizcaya, Shinova, y lo hicieron con dos conciertos sold out en Razzmatazz, donde presentaron al público barcelonés su nuevo proyecto ‘El presente’.
Con un telón de fondo inmejorable, la emblemática sala La Paloma, el dúo Besmaya volvió a Barcelona, tras haber enamorado al público del Cruïlla este pasado julio, en un concierto explosivo y lleno de energía que hizo vibrar toda la sala.
Skunk Anansie encabezó la recta final del ciclo con la llegada de marzo, y lo hizo de la única manera que saben: con un directo electrizante y feroz que no dejó indiferente a nadie.

El argentino Trueno mantuvo la explosividad y encendió un Sant Jordi Club agotado pocos días después. El rapero, que disfrutó de la compañía de la icónica Bad Gyal con quien cantó ‘Angelito’ por primera vez en directo, cautivó a más de cuatro mil personas que se acercaron a verlo.
Finalmente, el pasado sábado, Sexy Zebras cerró el ciclo con rock y pasión en un concierto ideal para poner punto final al Cruïlla Hivern y poner en marcha los motores para la espera del Festival Cruïlla, que este julio celebrará su 15ª edición.