En febrero, se detectaron grietas en la parte del muro posterior de la grada el Anfiteatro de Tarragona añadida en 1979. Es la que da a la vía del tren y al Vial Bryant. Ante esta situación, se hizo un perímetro de seguridad y se cerró al público el acceso a la arena. Al mismo tiempo, se colocaron testigos de tiza que se han ido controlando.
Según ha informado el Ajuntament de Tarragona mediante un comunicado 'urgente', este viernes se ha comprobado que los testigos se han agrietado. Dado el peligro de derrumbe de esta parte de la grada, el consistorio ha anunciado que actuará "por la vía de emergencia". La próxima semana se apuntalará el muro con un andamio y se señalizará un perímetro de seguridad para evitar el acceso.
El gobierno municipal ha confirmado que, aún así, el Anfiteatro continuará abierto de manera gratuita mientras no se pueda acceder a la arena. Para solucionarlo, a finales de abril, se instalará una estructura tubular que permitirá el acceso provisional. Han explicado, pero, que en ningún caso corre peligro la celebración, en este lugar, de los actos del festival Tarraco Viva.