Otro de los puntales de la reindustrialización en Tarragona es el electrolizador planificado en el Polígon Nord, una planta de hidrógeno verde que será vital para descarbonizar todo el polo petroquímico. La Comisión Europea también ha hecho pública la ayuda concedida, que se eleva casi a 62,5 millones, para otro proyecto estratégico.
Se conocen algunos detalles más de esta infraestructura que irá entre la Pobla de Mafumet y Constantí. «Se espera crear más de 900 empleos directos y más de 1.100 indirectos e inducidos durante las etapas de construcción», indica la Comisión Europea, que añade: «Se espera que el proyecto tenga un impacto socioeconómico en la región».
Será un equipamiento básico y principal de la Vall de l’Hidrogen y para todo el entramado industrial: «Al interactuar con las partes interesadas y los compradores locales, el proyecto desarrollará una red industrial sinérgica que creará una base para una transformación profunda de la descarbonización».
Ahorro de las emisiones
El proyecto, llamado T-Hynet, Tarragona Network Hydrogen, sería la mayor planta de hidrógeno verde de España, con una capacidad de 150 MW: «Se espera que produzca 2,7 toneladas de hidrógeno renovable cada hora».
La aportación medioambiental ha sido otra de las claves valoradas por la UE para conceder la subvención: «Se espera que el proyecto evite emisiones absolutas de gases de efecto invernadero de casi 1,4 millones de toneladas de CO2 equivalente durante los primeros diez años de funcionamiento».
El organismo europeo agrega que «el despliegue del electrolizador mejorará la producción industrial de hidrógeno renovable, presentando una alternativa más limpia y rentable a los combustibles fósiles para los compradores locales».
La inversión se presentó hace algo más de un año en la Cambra de Comerç de Tarragona. Los impulsores lo definieron como un «hito tecnológico». Allí se firmó el convenio para llevar a cabo los trabajos, en un consorcio liderado por Repsol y formado por Enagás Renovable, Iqoxe y Messer. La UE recuerda que «la ubicación del proyecto también es muy relevante para apoyar la adopción de un ecosistema de hidrógeno en la desafiante hoja de ruta de industrialización de España y Europa».
Beneficios económicos
Esta fábrica de hidrógeno verde no solo será importante para Tarragona y para España. Las autoridades continentales señalan que «contribuirá a la Estrategia Europea del Hidrógeno, apoyando la implementación de la producción nacional de hidrógeno en la Unión Europea».
Además, los beneficios económicos repercutirán en los proveedores de tecnología, los fabricantes de plantas de producción de hidrógeno y sus componentes; «industrias comerciales en áreas de mantenimiento y operación, movilidad de usuarios finales y centros de investigación».
La inversión global alcanza los 230 millones de euros, según anunciaron sus promotores. El proyecto se encuentra actualmente en ‘standby’, a la espera de que haya en España «un marco regulatorio estable y de confianza», tal y como ha reconocido Repsol durante estas últimas semanas, tanto con esta como con otras inversiones pendientes.
La Comisión Europea subraya, entre las numerosas virtudes del T-Hynet, Tarragona Network Hidrogen, la consecución de una «mayor eficiencia en el uso del agua (minimizando la descarga de agua y maximizando la recuperación)». La gestión de este recurso es vital en estos tiempos de escasez.