Luchar por un barrio o por una calle. Por darle vida, por hacerla amable y atractiva. Este es el objetivo de un grupo de vecinos de la calle Pere Martell, quienes han visto como, en los últimos años, su entorno se ha visto degradado. Después de intentar tirar adelante una asociación de vecinos que no prosperó, han optado por crear una plataforma. Se llama Treballem per Pere Martell y, actualmente, se coordinan a través de un grupo de WhatsApp, que suma ya más de 80 vecinos. «A raíz de las problemáticas que hay en la calle, decidimos organizarnos para dinamizar nuestro entorno», explica Maria Esther Fernández, miembro de la plataforma.
Una de las primeras acciones que llevaron a cabo fue la eliminación de los bancos en la esquina entre las calles Pere Martell e Higini Anglès. Allí se ponía un grupo de personas conflictivas que generaban inseguridad en la calle.
La plataforma se ha reunido en las últimas semanas con casi todos los estamentos de la ciudad. Con el alcalde, con los concejales, con la Guàrdia Urbana, los Mossos o representantes de la EMT. La principal reivindicación vecinal es acabar con el incivismo, provocado, muchas veces, por las personas sin hogar que pasan el día en Pere Martell.
«El problema no es que nuestra calle se haya degradado por si sola, sino que el aumento de población en general debería tener una respuesta por parte del Ayuntamiento y de otras administraciones», explica Fernández. La plataforma opina que, teniendo en cuenta que la calle Pere Martell es una de las calles más concurridas de la ciudad, los servicios de vigilancia y de limpieza deberían aumentar. «El Consistorio no puede tratar esta calle como otra cualquiera. Aquí se concentran muchas personas y vehículos», dicen desde la entidad, quienes aseguran que el alcalde Rubén Viñuales les ha mostrado su disposición para solucionar los problemas de la calle.
La estación de autobuses y el Parc de la Ciutat son otros de los puntos calientes que, según los vecinos, necesitan de más vigilancia y limpieza.
Orgullo de calle
Pese a la situación que vive actualmente la calle, desde la plataforma destacan que «se trata de una zona muy céntrica y bien conectada, a cinco minutos de centros comerciales, del mercado, del Serrallo y de la TAP», dice Fernández, quien añade que «los edificios están en buen estado, los pisos son grandes y hay comercios que dan respuesta a todas las necesidades». Para la plataforma es importante que la calle recupere su buena imagen. Ahora, la entidad ya prepara campañas de Navidad para revitalizar el comercio de la calle. La fuerza vecinal de Pere Martell se propone devolver el orgullo a sus vecinos.