El Servei Català de Trànsit y el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana han acordado actuar en cuatro tramos de la autopista AP-7, en concreto sobre 83 kilómetros, limitando y controlando la velocidad para reducir la siniestralidad y las congestiones.
El director del SCT, Ramon Lamiel, ha destacado en la presentación de las medidas que “esta intervención coordinada con el ministerio a la AP-7 nos permite actuar en los tramos con más víctimas de la autopista para intentar reducir esta siniestralidad, y también permitirá disminuir las congestiones y mejorar la calidad de servicio de la AP-7”. Lamiel también ha hecho referencia a que “el plan va más allá de la reducción de la velocidad y que se hará un seguimiento conjunto periódico para evaluar posibles cambios y mejoras”.
El principal punto en que se actuará corresponde a los 19 kilómetros de autopista paralelos a la B-30, en el Vallès, donde se crearán tramos de velocidad variable de 100 o menos km/h.
Afectación en Tarragona
En la provincia de Tarragona se realizarán actuaciones en dos puntos:
- Tramo Altafulla-Constantí (pk 238-247). El Servei Català de Trànsit instalará un radar de tramo en esta ubicación de la autopista en sentido sur para poner freno al exceso de velocidad detectado en este recorrido recto, caracterizado por una fuerte pendiente y en el que predominan las colisiones por alcance. Mientras no esté operativo, los Mossos d’Esquadra intensificarán los controles de velocidad en esta área.
- Terres de l’Ebre: tramo Calafat-l’Ampolla (pk 288-313). Se reducirá la velocidad para todos los vehículos a 100 km/h. Además se continuarán estableciendo las limitaciones puntuales a los vehículos pesados, consistentes en reducir la velocidad de los camiones a 80 km/h y la prohibición para estos vehículos de realizar adelantamientos.
Finalmente, en la ronda de Girona, uno de los cuatro carriles se convertirá en un vial reservado a las incorporaciones y salidas
Conviene destacar que este año esta autopista acumula ya 23 víctimas mortales, el 17% de las 135 personas muertas a las carreteras catalanas. Además, en la AP-7 este 2022 también se han registrado 45 heridos de gravedad.
También hay que remarcar que desde la liberación de los peajes en este eje vial la movilidad ha aumentado un 40% y las congestiones por siniestros se han incrementado un 98%. En este sentido, estas nuevas medidas van encaminadas tanto a reducir la siniestralidad como las congestiones, y en definitiva mejorar el servicio de esta autopista.