El juzgado de instrucción 1 de Reus (Tarragona) investiga a once agentes de los Mossos d'Esquadra que neutralizaron, en diciembre de 2021, a Eugen Sabau, conocido como el 'pistolero de Tarragona', que hirió a tres excompañeros suyos de trabajo de Securitas y a un agente en su intento por huir.
El juez ha admitido a trámite una querella presentada por la hermana de Sabau, que considera desproporcionada la actuación de los Mossos d'Esquadra para neutralizarlo, puesto que su actuación provocó a su hermano una tetraplejía y secuelas graves por las que finalmente se le aplicó la eutanasia.
Eugen Sabau se dirigió el 14 de diciembre de 2021 a las oficinas de Securitas, empresa de la que había sido despedido recientemente, donde disparó contra tres de sus compañeros de trabajo y luego huyó, por lo que se inició una persecución policial en la que también resultó herido de un disparo un agente de la policía catalana.
El pistolero se atrincheró después en una masía abandonada en Riudoms (Tarragona), hasta que fue neutralizado por el Grupo Especial de Intervención (GEI) de los Mossos tras un tiroteo en el que resultó herido de gravedad, lo que le provocó una tetraplejía por la que finalmente se le concedió la eutanasia en agosto de 2022.
Los cuatro heridos por Sabau se opusieron a la eutanasia pedida por el acusado, aunque un juzgado de Tarragona se la concedió, lo que, ante su muerte, provocó que se cerrara la causa penal.
En la querella, la hermana del vigilante alegaba que las heridas que sufrió Sabau "no son justificables con la actuación policial", que considera "desproporcionada", y se basa para ello en los informes médicos, en las propias declaraciones de los agentes y en las de otros testigos.
Aunque la eutanasia del 'pistolero' supuso el cierre del proceso penal, ahora el juzgado de instrucción 1 de Reus reabre la causa al admitir la denuncia presentada por la hermana para investigar los pormenores de su detención.
Además de citar como investigados a los policías, el juez, en un auto, ha abierto varias diligencias de investigación en las que solicita múltiples informes, como el de la Comisión de Garantías del Departamento de Salud de la Generalitat que avaló la eutanasia o la declaración de varios testigos.
Uspac, el sindicato de los Mossos que lleva a algunos de los agentes investigados en esta causa, lamenta en un comunicado que "tres meses después de su suicidio asistido, aparece una hermana que interpone una denuncia contra los mossos que le neutralizaron por cobrar una indemnización, algo que no hizo ni el interesado ante el juez cuando tuvo la oportunidad".
El sindicato defiende que la actuación de estos mossos fue "perfecta, sin ningún tipo de mácula" y "meritoria", ya que lograron detener al 'pistolero' con vida y sin que ningún agente resultara herido en la operación policial.