«Todos sabemos que históricamente la Renfe nunca ha funcionado bien, pero lo de estos últimos cinco meses es una catástrofe», afirma Ana Gómez. Esta tarraconense utiliza a diario el tren para ir a Barcelona por motivos de trabajo. No obstante, afirma que los retrasos e incidencias que se registran de forma reiterada en el servicio están afectando la carrera profesional de las personas que como ella realizan este trayecto.
«Hay gente que ha perdido el trabajo, que no promociona o que está dejando de optar a un puesto de empleo porque le dicen que si va en tren no llegará a la hora», añade Gómez.
La «indignación» se creciente entre los viajeros de todas las líneas de Cercanías y Regionales que forman parte del corredor sur –es decir, la R-14, R-15, R-16 y R-17–, que realizan habitualmente este desplazamiento con la capital catalana. Estos ven como cada día, desde que se dirigen hacia la estación hasta que bajan en su destino final, es una caja de sorpresas, en la que nunca saben con lo que van a encontrarse. Esto hace que en los días que tienen una reunión de trabajo opten por madrugar más de lo habitual o busquen una alternativa al tren, ya que no confían en la fiabilidad del servicio.
Informados por Whatsapp
Para estar informados sobre la situación que se registra a diario en el servicio, desde hace algunos meses han creado un grupo de Whatsapp a través del cual comparten toda la información sobre las salidas, llegadas y cómo van los trenes en tiempo real. Se llama RIUV, las siglas que corresponden a la República Independent del Últim Vagó, una cuenta que ya suma a más de un centenar de viajeros que utilizan este corredor, y que les permite informar al resto de compañeros. «Ya que la Renfe no nos informa y muy a menudo vas a la estación y no sabes cuándo pasará el próximo tren o qué está pasando, lo hacemos a través de esta red», explican.
De pie hasta Barcelona
El malestar no tan solo viene por la falta de fiabilidad en el servicio, sino también por las condiciones en la que a menudo se ven obligados a viajar. Sobre todo a primera hora de la mañana o en días en los que hay picos de afluencia, como los lunes para ir a Barcelona o los viernes por la tarde, para la vuelta. Explican que es habitual que, cuando el convoy llega a la estación de Tarragona, ya vaya lleno y, por tanto, a partir de Altafulla tienen que viajar de pie o sentados en el suelo.
Piden que se revisen los horarios y fiabilidad en un servicio con muchas incidencias
«Esta mañana –ayer para el lector– el tren tan solo tenía tres vagones. Es habitual que la gente vaya de pie, en unas condiciones que no son las correctas. Incluso hay quien ya se ha comprado un taburete para sentarse, pero algunos días ni siquiera tiene espacio para apoyarlo», añade esta usuaria.
Uno de los inconvenientes es que las personas que entran a su puesto de trabajo a las 8 de la mañana se ven obligados a coger el tren que sale a las 5.51 horas desde Tarragona y después, el siguiente, ya no pasa hasta las 6.53 horas, por lo que hay una hora sin servicio. En cambio, entre las 7 y las 8 horas de la mañana pasan hasta cuatro convoyes, con tan solo ocho minutos de diferencia entre el de las 7:47 y el de las 7:55.
Cambios en los horarios
Esta disfunción en los horarios también se produce por la tarde, cuando desde la estación de França sale un convoy a las 18:47 y el siguiente no pasa hasta las 19:40, y después hay otro programado para las 19:43. Además, el último tren de la noche hacia Tarragona sale a las 21:13 horas. «Ya no te planteas ir al teatro o lo que sea, pero es que si un día tienes que quedarte para una cena es imposible», argumentan.
Los afectados se están organizando a través de la plataforma Dignitat a les vies
Estos usuarios habituales piden una revisión de los horarios y que se planifique de forma correcta el servicio, con trenes más largos para evitar que la gente tenga que viajar con las condiciones actuales. Unas reivindicaciones que han hecho que el colectivo se haya organizado a través de la plataforma Dignitat a les vies, que ya está dando sus primeros pasos.
Por el momento, tienen previsto un acto el próximo día 7 de abril a las 12 horas, delante de la estación de trenes de Tarragona. Allí leerán un manifiesto para hacerse eco de la problemática y en el cual quieren insistir que estos déficits en el servicio les sitúa en una «inferioridad de condiciones laborales». Asimismo, han solicitado una reunión con el Ayuntamiento de Tarragona y prevén iniciar contacto con la plataforma Trens Dignes para sumar al conjunto de afectados de este corredor. Unos contactos que se prevé que se hagan más intensos de cara a las próximas semanas, a medida que avance la campaña electoral para los comicios del 12 de marzo.