Quedan menos de tres semanas para que Tarragona se llene de música, plumas, sátira y fiesta. El Carnaval de nuestra ciudad es único y gran parte del mérito es, sin duda, del inmenso esfuerzo que ponen las 29 comparsas año sí, año también. Esta recta final es el tramo clave de estos largos meses de trabajo. Todas las comparsas se reúnen a diario para ensayar y ultimar los preparativos. Muchas de ellas no dejan ni hueco para el descanso, lo hacen los siete días de la semana, incluso en medianoche si es necesario, para tener los elaborados disfraces, coreografías, trajes y carrozas listas para lucir el día de la rúa.
Las expectativas siempre son altas, tanto para los participantes como para el público. Todas quieren sorprender a la ciudad, que disfruten, bailen y se diviertan con sus enérgicas presentaciones. Pero el precio es alto. «El sprint final siempre es complicado, vamos todos apurados para llegar al plazo y a veces se hace cuesta arriba», cuenta Laura Pérez, presidenta de Som i Serem.
La comparsa afronta muchos retos este año: además de las dificultades internas que ha supuesto la separación de Urban Style, el grupo ha decidido ponerse a prueba y plantear una propuesta innovadora, distinta de sus apuestas anteriores. Con 110 personas desfilando y tres carrozas, Som i Serem presentará una temática inspirada en las tribus amazónicas dedicada a la mujer y el cáncer de mama. «Son muchas noches sin dormir, con nervios, sin poder dedicar tiempo a la familia; pero una vez llega el gran momento, te olvidas de todo esto y merece la pena», valora Pérez.
Otra comparsa que apuesta por la innovación son los Amics de la Part Alta, que ensayan una mañana de domingo en l’Antic Escorxador. Plantean una temática única: la Navidad. Parece paradójico combinar esta fiesta con carnaval y su presidente, Sergi Carrillo, lo tiene claro: «Es una propuesta arriesgada. Hace años que la teníamos pensada y finalmente nos hemos atrevido. Estamos seguros de que todo el mundo lo va a disfrutar y se sentirán identificados».
Innovación, ilusión, cooperación
Como explica Carrillo, esta es su presentación más ambiciosa; está siendo un «reto mayúsculo» en el que se está dedicando un gran esfuerzo y mimo en cada detalle. El presidente asegura que «van a sorprender», con una puesta en escena que juega con la dicotomía entre «la elegancia y la fantasía, la tradición navideña y la innovación, pero sin perder la esencia festiva del carnaval». No quiere revelar más detalles, prefiere que el lector deje volar su imaginación.
Una responsabilidad muy grande es la que tienen las comparsas que comparten reinado: Disc45 y Colours Fantasy. «Queremos que la ciudad disfrute de nuestro granar honor de volver a reinar», expresa el presidente de Colours Fantasy, Òscar Urgel. Las comparsas ganadoras llevan ensayando desde septiembre para la Disfressa d’Or (23 de febrero), la Entrada del Rei i la Concubina (28) y las rúas (1 y 2 de marzo).
El Carnaval de Tarragona es mucho más que fiesta y plumas. Todas las comparsas se dejan la piel y, como dice Sergi Carrillo, «el espíritu de colectivo y cooperación, la unión de gente de todas las edades para hacer lucir la ciudad es lo que lo hace grande».
