Una delegación de representantes de las entidades a favor del transporte público del territorio acudirán este jueves al pleno del Parlament. La comitiva estará formada por miembros de Dignitat a les Vies, Trens Dignes, Diàspora Ebreca, Mercaderies per l’interior, la Associació per a la Promoció del Transport Públic (PTP) y los Amics del Ferrocarril de Valls, que escucharán con atención el debate en materia ferroviaria que se llevará a cabo en la cámara catalana.
Este llegará a instancia de las mociones presentadas por los grupos de Junts per Catalunya y ERC, en las que se abordará la situación a raíz del corte de vías así como los proyectos de futuro en materia ferroviaria.
El texto de las mociones que se propondrán tiene algunos paralelismos. Sobre todo en lo que respeta a los servicios del Pla de Transport Alternatiu. Ambas formaciones solicitan incrementar el número de autobuses y reforzar la información al usuario. También se habla de establecer medidas compensatorias o bonificaciones para los cerca de 15.000 usuarios afectados.
Otros puntos de acuerdo son la recuperación del Euromed de L’Aldea, el impulso de la primera fase del tranvía y la segregación del transporte de mercancías del de pasajeros, en el ámbito de Tarragona. Sobre esta última cuestión, Junts per Catalunya exige que se presente «antes de finalizar el 2024», el plan de reordenación para trasladar de forma definitiva las mercancías por el interior. Una petición que se hace después de denunciar los «retrasos sistemáticos» en la ejecución del Corredor del Mediterrani y la «saturación de las líneas» que comportará el tercer carril.
y el modelo de futuro
Por este motivo, desde ERC se solicita que se impulse y convoque la Taula Estratègica del Corredor del Mediterrani «antes de finalizar el 2024».
En lo que difieren ambas formaciones es en el traspaso y el modelo de futuro. Por un lado, los republicanos piden desplegar el acuerdo bilateral alcanzado con el PSOE, con el objetivo de conseguir la constitución de la nueva operadora entre 2024-2025, así como el traspaso de «las primeras infraestructuras» a partir del año que viene. Por contra Junts, exige que «la propiedad y la gestión pasen a ser 100% catalanas», de forma que se incluya todas las líneas e infraestructuras, además de los recursos económicos, tanto a nivel de deuda anual de explotación como de inversiones pendientes.
La diputada tarraconense de ERC Raquel Sans exige al Govern de la Generalitat que «trabaje para una planificación y unos trenes dignos» que «den respuesta a todos los retos que tenemos como país».