Los autobuses directos a Barcelona desde Tarragona han ido de menos a más y ya son cerca de 500 los usuarios que a diario utilizan este transporte. «Hemos pasado de seis personas que utilizábamos los primeros buses de la mañana a cerca de 40», decía la portavoz de Dignitat a les Vies.
El servicio está teniendo una muy buena aceptación por parte de los usuarios, a pesar de que a veces no es nada fácil para los viajeros no habituales.
Lo primero que hace uno cuando quiere viajar es consultar los horarios a través de la página web de la compañía, y por ninguna parte aparece ningún banner o algo que haga referencia a la T-10/120.
En la taquilla de la estación si que hay un cartel. Además, la compañía explica que ha pedido al Ayuntamiento abrir una hora antes la terminal para atender, desde la ventanilla, a los clientes que viajan a primera hora de la mañana. Mientras tanto, entre seis y siete de la mañana el orientador es quien vende los billetes, permitiendo pagar con tarjeta.
El inconveniente: los autobuses directos solo funcionan de lunes a viernes. La Generalitat dice que se ha hecho teniendo en cuenta que el servicio responde a las necesidades de movilidad obligada por motivos de trabajo o estudio. «Hay gente que trabaja los fines de semana o, como mínimo, estaría bien que hubiera alguno los domingos por la tarde para los universitarios», indica Ana Gómez. La alternativa: coger el autobús que pasa por el aeropuerto. Pese a ello, la T-10/120 tan solo es para ir a Barcelona.