Agentes de la Guàrdia Urbana de Reus han interceptado esta semana una furgoneta con exceso de carga en la baca. El vehículo circulaba por la ciudad con un bulto en el techo que no presentaba estabilidad.
Una patrulla detuvo al conductor y el vehículo fue trasladado al depósito municipal ante el peligro que suponía la circulación con dicha carga. Además, se sospechaba que el peso añadido superaba lo permitido por la Ley de Seguridad Vial.

La furgoneta quedó retenida en el depósito, a la espera de poder realizar el pesaje correspondiente. Al día siguiente, y con la colaboración de los Mossos d’Esquadra, se procedió a pesar el vehículo con la carga, y se confirmaron las sospechas: superaba el límite máximo permitido.
La báscula reveló que el vehículo transportaba 1.100 kilos de carga de más, y que los dos ejes traseros soportaban un peso cercano a una tonelada cada uno.
El pesaje se llevó a cabo en presencia del conductor y de un familiar, quienes acudieron a las instalaciones municipales con otro vehículo. Una vez verificada la infracción, los agentes procedieron a descargar la baca y a repartir la carga entre los dos vehículos, que posteriormente recibieron la autorización para marcharse.