Este domingo 27 de octubre, como ya es tradición en esta época del año, se realizará el cambio de hora al horario de invierno.
A las 03:00 de la madrugada, los relojes deberán retrasarse una hora, volviendo a marcar las 02:00. La buena noticia: podremos dormir una hora más.
Este ajuste, conocido como el cambio al horario de invierno, marca el fin del horario de verano y tiene como objetivo aprovechar mejor la luz natural durante las horas de actividad.
El cambio de hora afecta a la mayoría de países que siguen la normativa de la Unión Europea, así como a varias regiones de América del Norte y del Sur. Sin embargo, no todos los países lo adoptan, y en los últimos años ha surgido un debate creciente sobre la efectividad de esta práctica. En 2018, la Comisión Europea propuso eliminar los cambios de hora, permitiendo a los países elegir entre quedarse permanentemente en el horario de verano o el de invierno. A pesar de ello, la medida no ha sido implementada de forma generalizada.
¿Cómo afecta en Tarragona?
Al vivir en un lugar como Tarragona, estamos acostumbrados a largos días de sol mediterráneo, por lo que el cambio de hora de invierno se siente un poco más.
El sol se pone antes y las tardes se nos hacen más cortas, algo que puede afectar nuestro ánimo y rutina. A finales de noviembre o diciembre, ver cómo la luz del día se escapa antes de las 18:00 puede darnos la sensación de que el día se nos va volando.
Consecuencias en la salud y el bienestar
Aunque el cambio de hora tiene sus beneficios en el ahorro energético, también existen estudios que señalan posibles efectos negativos en la salud. Algunas personas experimentan alteraciones en el sueño y en sus ritmos circadianos, lo que puede provocar fatiga, falta de concentración y cambios en el estado de ánimo en los días posteriores al ajuste.
Este debate ha llevado a que algunos países consideren mantener un solo horario durante todo el año, eliminando los cambios bianuales. Por el momento, en la mayoría de Europa el cambio de hora sigue siendo obligatorio.
Recomendaciones para adaptarse al cambio de hora:
Ajustar el sueño gradualmente: Intenta ir a dormir unos 15 minutos más tarde cada día antes del cambio, para que el cuerpo se acostumbre poco a poco.
Mantener la rutina: Realiza las actividades diarias a la misma hora para ayudar al cuerpo a ajustarse.
Aprovechar la luz natural: La exposición al sol por la mañana ayuda a regular el reloj biológico y a adaptarse al nuevo horario.
Recuerda ajustar todos tus dispositivos y relojes para evitar confusiones, y disfruta de esa hora extra de descanso este domingo.