El último día de exproReus continuó ayer por la mañana con bastante afluencia de visitantes a simple vista. Un público, que lo ha pasado genial estos días, ha sido el infantil y adolescente. Este año, el evento concibió varias áreas dirigidas a pequeños y jóvenes, quienes han podido crear elementos y experimentar con la realidad virtual y la robótica, hasta escalar un rocódromo, entre otras prácticas.
Una de las áreas más populares de la feria fue la de Petits Enginyers, empresa de Reus que acerca la ciencia y la tecnología a centros educativos y entidades. «Estos días, uno de nuestros espacios, el de creación, ha tenido muy buena acogida, hay bloques gigantes de porexpán y estructuras más pequeñas imantadas y Lego para crear estructuras», detalló la coordinadora de actividades de Petits Enginyers, Esther Borràs.
En dicho espacio, además, también hubo instaladas un par de bicicletas estáticas con las que, pedaleando, se podía hacer funcionar coches de circuito Scalextric. «Esta es una de las actividades de más éxito», confirmó la encargada. Sólo el día festivo, añadió, «acogimos, en las actividades que tenemos, hasta 1.200 niños y jóvenes participantes». «No nos esperábamos tal cantidad, pero sí que, en un día de fiesta, nos fuera bien», admitió Borràs, quien, de hecho, ya gestionó la iniciativa la pasada edición de la feria y hace un buen balance. Y es que Petits Enginyers creó, en esta feria, hasta «seis espacios con actividades para jóvenes de diferentes edades». Aparte del mencionado, hubo, por ejemplo, uno en el que hacer realidad diseños variados; otro de realidad virtual; y otro de robots.
Por otro lado, y desde Monobloc Reus, especializados en escalada y de su práctica en rocódromo, estaba Joan Dalmau, quien desde dicha empresa, afincada en la ciudad, expuso que «tras seis años abiertos para el público adulto, hemos querido dar a conocer en la feria la versión del rocódromo para niños, el Minibloc, que abrimos en abril». La actividad acogió «todo tipo de niños, los hubo más y menos atrevidos». A partir de su presencia, por primera vez en exproReus, «esperamos conseguir, también, inscripciones y darnos a conocer más, promoviendo la cultura de la escalada, que es algo que te permite estar el contacto con la naturaleza».
El balance: más de 4.000 niños en actividades infantiles
La 51a edición de exproReus cerró puertas ayer con «muy buena afluencia y buenas valoraciones» de organización y expositores participantes. Las actividades, centradas sectores como la gastronomía, la automoción y la tecnología, han sido «reclamos de éxito». Otro de los puntos destacados fueron las actividades infantiles, por donde se calcula que pasaron más de 4.000 niños. En cuanto a las TIC, el stand de la Tronada 360, fue «uno de los espacios con mayor afluencia de público». Casi el 35% de los visitantes de exproReus, por otro lado, pasaron por la zona de restauración del Tasting Village. FiraReus Events arranca nuevo estudio de impacto económico para conocer las cifras de automoción en la feria.