Repartidos de norte a sur y de este a oeste, los seis Centres Cívics de Reus ejercen, por primera vez este verano y desde el lunes 1 de julio, como refugios climáticos. Sus instalaciones permanecerán abiertas durante los meses de máximo calor como parte de los planes del Ayuntamiento para ampliar la red de este tipo de espacios, donde la ciudadanía puede protegerse de las altas temperaturas.
Aunque en los primeros días, coincidiendo con los chubascos de principios de semana y el fresco que les sucede, aún son muy poco frecuentados, se contempla que vaya habiendo afluencia a medida que avancen las semanas, también a raíz del anticiclón que llegará hoy.
Desde el Centre Cívic del Carme explicaban este 2 de julio que, por el momento, el uso del espacio en el sentido de refugio climático se ciñe «quizás a las pequeñas esperas de las personas que vienen a realizar cualquier gestión, que pueden sentarse y aprovechar la climatización o beber algo», porque todavía no ha llegado el bochorno ni el servicio está plenamente difundido.
Allí, por ejemplo, se puede visitar ahora una exposición de pintura de las clases de La Caixa para mayores. Y también hay cursos y talleres programados.
El objetivo es que los Centres Cívics «proporcionen confort climático a la población» a la vez que actividades. Muchos tienen puntos de acceso libre a ordenadores o estanterías con libros. No se han habilitado estancias específicas para el rol de refugios climáticos, sino que el cambio pasa por mantener los edificios abiertos al público en fechas en las que otros años cerradas, con sus condiciones de bienestar habituales.
Los Centres Cívics del Carme, Mestral y Mas Abelló abren mañana y tarde en julio y agosto. El Ponent, mañana y tarde en julio y solo mañana en agosto; el Llevant, mañana y tarde en julio y en agosto solo del día 1 al 14 y de 8 a 15 h; y el Migjorn, mañana y tarde en julio y en agosto mañana y tarde solo del 1 al 14.