Este verano, el Ayuntamiento de Reus ha intensificado el control de plagas de roedores e insectos, a través del nuevo contrato de prestación del servicio. La previsión es que, al cabo del año, haya un incremento de un 78% de actuaciones contra roedores y de un 34% en el caso de las cucarachas. De hecho, solo en junio y julio ya se realizaron 2.824 intervenciones contra roedores y 3.566 contra insectos. No obstante, «siguen habiendo ratas, entran en los patios de las casas», expone Montserrat Granero, vecina de Mas Abelló.
Según expone, no ha percibido un incremento de actuaciones contra ratas, mientras que en el barrio vecino de Mas Pellicer «sí que hemos visto un refuerzo», dice Eduardo Navas, al frente de la Associació de Veïns I de Maig. No obstante, coincide que por ahora no ha surtido efecto y que «de ratas sigue habiendo, y así seguirá mientras la gente deje la basura fuera de los contenedores», expone Navas. Recuerda que es una acción sancionable, con multas de hasta 750 euros, «pero nadie hace cumplir con la ordenanza», lamenta.
Desde Mas Abelló, Montserrat Granero relata que en su zona las ratas siguen entrando en los patios de las casas. En primavera denunciaron que los roedores se comían la fibra óptica. En su caso le sucedió en tres ocasiones en solo dos meses y temía que le volviera a pasar porque «la compañía telefónica solo se hace cargo de cambiar la fibra óptica tres veces al año». Por ahora, ya no le ha vuelto a pasar, pero cuenta que a algún vecino sí.
Pero el problema de las ratas es también una cuestión de «salud», con el miedo de que puedan morder, añade Granero. Además, las ratas no solo le han entrado, sino que «criaron en el patio, había seis o siete crías». Y la solución por la que optan los vecinos es poner veneno y trampas, a la espera de que el Ayuntamiento intensifique aún más las actuaciones.