El activista Mohamed Said Badaoui ha sido detenido la tarde de este martes, 18 de octubre, por la Policía Nacional. El hombre, presidente de la Associació per la Defensa dels Drets de la Comunitat Musulmana (Adedcom) de Reus había hecho pública a principios de agosto la recepción de una notificación administrativa de expulsión del país.
«Se me acusa de radicalización sin aportar prueba alguna, de ser una persona activa en redes sociales, de tener pretensiones políticas, de tener muchos contactos... Insisto, todo sin prueba alguna», había denunciado entonces.
Esta tarde, finalmente, la detención se acabó practicando y Badaoui fue trasladado a la comisaría de La Verneda, en Barcelona. Su caso había levantado una oleada de reacciones tanto en la ciudad como a nivel de Catalunya.
Y había llegado, incluso, al ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska mediante varios grupos políticos. En las últimas semanas, Badaoui había expresado a través de redes que «tener que esperar que la administración tome la decisión que puede repercutir en tu futuro y el de tu familia es agobiante» y se refugiaba en el deporte.
En agosto, durante una rueda de prensa en el Mercadal, el presidente de Adedcom se presentaba como «un hombre de 40 años que lleva 30 viviendo en la provincia de Tarragona y tiene tres hijos nacidos en Valls y Reus». «Creo en la igualdad de oportunidades y en una convivencia pacífica», destacaba. Badaoui expuso entonces que la Policía Nacional había iniciado gestiones para expulsarlo del país tras señalarlo como «radicalizado», y que lo hacía en pleno verano, sin darle margen de maniobra y tras haber solicitado la nacionalidad española.
«Defender los derechos de las personas no es un delito»
«Defender los derechos de las personas no es un delito, pero acusar a alguien con falsos argumentos sí», subrayó Badaoui en aquella comparecencia, y dijo que «van contra mí y quieren que deje de reivindicar los derechos de la comunidad musulmana, cosa que seguiré haciendo hasta el final». «Siempre me he esforzado por crear puentes entre la comunidad musulmana y la autóctona», precisó.
La nacionalidad española que había solicitado un tiempo atrás le había sido denegada recientemente. Las alegaciones que presentó contra el expediente de expulsión iniciado por la Policía Nacional también le habían sido rechazadas, según él mismo comunicó.