Imaginen concentrar el trabajo de cuatro años en cuatro minutos. Seis días en un segundo. Medio millón de segundos en uno solo. Tarea ardua, complicada y tan solo al alcance de unos pocos. Entre ellos, los doce participantes de la séptima edición del concurso Presenta la teva tesi en 4 minuts.
El reto es claro, y no por ambicioso deja de ser posible, algo que demostraron con creces los finalistas, clasificados después de pasar una eliminatoria. Al final, fueron doce elegidos de entre 154 concursantes.
Los nervios han sido el acompañante de todos los elegidos. Antes, durante y después. Y es que, sumado a las muchas dificultades que ya tiene sintetizar 1.460 días en cuatro minutos, el otro objetivo era el de llevarse alguno de los premios.
En total, han sido cuatro: un primer premio de 3.000 euros, que ha conseguido Mireia Bayilina, estudiante de la Universitat Internacional de Catalunya (UIC), por su tesis titulada Planificar anticipadament per cuidar dignament; un segundo premio de 2.000 euros, que ha cosechado Gala Pujol, estudiante en la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), cuyo trabajo se titula Com canviar el món amb una palleta de cartró, y un tercero de 1.000 euros, otorgado por el voto del público y ganado por Adrià Vilalta, de la Universitat Rovira i Virgili (URV), por la tesis El gust més enllà de la boca.
Por otro lado, se ha añadido la mención especial ‘Assumpció Català i Poch’, en honor a esta matemática y astrónoma. Este premio también ha estado dotado con 1.000 euros y fue para la tesis La intercomprensió com a trampolí al plurilingüisme: implicacions d’una experiència didàctica a Catalunya amb estudiants de secundària, de la alumna Raquel Serrano, estudiante en la Universitat de Barcelona (UB).
El jurado ha tenido difícil decidir, ya que las exposiciones han mostrado un nivel muy alto, con una gran capacidad de resumen –no podía ser excesiva, ya que, si estaba por debajo de los tres minutos, podía haber una penalización–.
Pero no ha sido solo la síntesis lo que ha destacado en las exposiciones del alumnado, sino que en ellas ha habido esa salsa, ese picante que tan necesario e indispensable es en una presentación oral. Mirar más allá de la comunicación verbal es un requisito innegociable para cocinar una presentación atractiva y mantener al público atento.
Para hacerlo, se han demostrado diferentes vías: algunas que interpelaban más al público, otras que tiraban de la ironía, y también aquellas que llegaban hasta lo más profundo del corazón. Con diferentes ingredientes, la misma receta, siempre iniciada, eso sí, con una frase que ha servido de gancho.
Para paliar los nervios previos, han intentado poner una pizca de tranquilidad las palabras de la conductora del concurso, Meritxell Plana; de la directora de CaixaForum Tarragona, Maria Glòria Olivé, y del director general de la Fundació Catalana per a la Recerca i la Innovació (FCRI), Jordi Mas.
Sin embargo, antes de este tipo de momentos, es realmente complejo llamar a la calma. La inquietud y la incertidumbre están ahí y las uñas empiezan a sufrir, pero son ese tipo de sensaciones que ayudan a estar alerta, activo y preparado para la presentación de la temática.
Ha habido mucha variedad en este sentido, como el ejercicio físico para el tratamiento de trastornos mentales severos; la formación en línea del profesorado; la comprensión del cambio climático; la asociación de cultivos agrícolas y su oportunidad en el campo; las perspectivas de maternidad de las mujeres con discapacidad intelectual, o el sentido del gusto más allá de la boca, entre otras cuestiones.
Este evento está organizado por el Departament de Recerca i Universitats, a través del Consell Interuniversitari de Catalunya (CIC); las doce universidades catalanas y la FCRI.