La Part Baixa de Tarragona cuenta con 229 locales comerciales vacíos

La diagnosis del Pla Integral pone énfasis en la necesidad de generar más espacio verde urbano y la mejora del espacio público en el eje formado por Apodaca, Plaça dels Carros y calle Reial

20 marzo 2023 21:58 | Actualizado a 21 marzo 2023 07:00
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La Part Baixa tiene un total de 229 locales vacíos, ya sea en fase de reforma, en venta o en alquiler. Es uno de los datos más relevantes de la diagnosis del Pla Integral del antiguo barrio de la Marina, el cual se daba a conocer ayer, en una presentación en el Palau de Congressos en el que asistían una treintena de vecinos y representantes de las entidades de esta parte de la ciudad. «En los setenta la Part Alta estaba mucho peor y pudo cambiarse, ahora le toca a la Part Baixa», afirmó el alcalde de Tarragona, Pau Ricomà.

El comercio y la actividad económica es uno de los ejes vertebradores de este plan. Y, en este sentido, el proceso de participación que se ha impulsado para hacer esta diagnosis ha permitido constatar que tan solo el 21,5% de las personas opina que su estado es bueno o muy bueno, mientras el 78,5% restante da una respuesta que va del regular (44,6%) al muy malo (9,4%). En esta valoración hay que tener en cuenta un último elemento, ya que siete de cada diez vecinos hacen la compra de los productos cotidianos en el barrio, mientras los establecimientos dedicados a ropa y complementos prácticamente son inexistentes.

La calidad del espacio público tiene mucho que ver con la situación del comercio, siendo otro de los elementos que se ha tenido en cuenta en esta fase previa de redacción del plan. En este caso, la valoración que se hace tampoco es satisfactoria para el 62,1% de los participantes, mientras que un 32,6% considera que es regular y el porcentaje de personas que están muy satisfechas o bastante no alcanza el 5%.

Al respecto, se apunta a la necesidad de generar más zonas verdes urbanas en este entorno y de reparar calles y aceras. Este último apartado sitúa su foco en el eje formado por la calle Reial, Plaça dels Carros y Apodaca, en un avanzado estado de deterioración y donde se tiene en cuenta que deberían tomarse soluciones para su pacificación, generando plataformas únicas que mejoren la calidad del espacio público. Y, en este sentido, una de las actuaciones más inmediatas será en la calle Orosi, cuyas obras se iniciarán después de Semana Santa.

Helena Cruz, de la empresa encargada del proceso TerritorisXL, afirmaba durante la presentación que «el reto será compatibilizarlo con la disponibilidad de aparcamiento», teniendo en cuenta que muchos edificios no disponen de parkings soterrados.

Eliminar barreras

La mejora de las conexiones con el mar y el resto de la ciudad será otro de los elementos que deberá incluir el plan. Y, en este sentido, se señalan cuatro ámbitos prioritarios que pueden generar oportunidades de transformación. Estos son la Plaça dels Infants con su entorno formado por la antigua fábrica de la Chartreuse y los jardines de la calle Vapor; el Teatre Romà con los solares adyacentes donde están las Termes de Sant Miquel; la Plaça dels Carros y su conectividad tanto con el puerto como con la estación de trenes; y el Palau de Congressos.

Ricomà puso en valor el pasado comercial de todo este entorno, que se desarrolló en paralelo a la actividad portuaria. «Es un barrio con muchas oportunidades de regeneración», decía. Pese a ello, ahora mismo más del 55% de las personas que han participado en este proceso aseguran que esta zona ha empeorado en los últimos cinco años y el 73% señala como una de las problemáticas la falta de actividad comercial.

El concejal de Territori, Xavier Puig, afirmaba que «debemos poder imaginarnos una Part Baixa diferente». «Todos los barrios son muy importantes y no se trata de jerarquizarlos, pero sí que hay una situación estratégica del Barri del Port, porque tiene una capacidad de contagio para todo el entorno que puede ser un revulsivo para el centro de Tarragona», añadía.

Esta parte del proceso participativo se ponía en marcha en noviembre del año pasado y culminó el pasado mes de marzo. Un total de 395 personas han respondido a la encuesta y se creó un grupo impulsor con las entidades representativas del barrio, además de los talleres deliberativos y las rutas exploratorias. El siguiente paso, por parte de la empresa encargada, será poner orden a las propuestas recogidas para mirar si son viables y hacer un plan de acción. Este se dará a conocer en otoño para que en noviembre pueda aprobarse la hoja de ruta de la Part Baixa.

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