El consejo de administración de Renfe adjudicó en su reunión de este lunes el contrato para el transporte alternativo por carretera, que a partir del próximo 1 de octubre ofrecerá el servicio sustitutivo al tren, a raíz de las obras en el túnel de Roda de Berà.
La Unión Temporal de Empresas (UTE) Tarragona formada por siete empresas de transporte será la encargada de prestar este servicio, teniendo en cuenta que tan solo se ha presentado una oferta para un concurso que en la primera convocatoria quedó desierta.
Según ha podido saber el Diari, este conglomerado suma las principales compañías del sector del transporte público por carretera en Catalunya como son Canals, Izaro, Calella, Julià, Plana, Hispano de Fuente en Segures (Hife) y La Hispano Igualadina (Monbus). «Cada empresa tenemos nuestra flota disponible y en algunos casos se traerán vehículos de fuera», explicó Josep Albert Vallcorba, presidente del Grup Plana.
Este servicio alternativo movilizará una flota de 87 autobuses que, de acuerdo con las condiciones que se han establecido, ofrecerán más de 600 circulaciones y 30.500 plazas diarias. Este dispositivo debe garantizar la movilidad diaria de los cerca de 15.000 viajeros del servicio de Regionals del corredor sur, que se verán afectados por unas obras que alterarán la normalidad de las líneas R-14, R-15, R-16 y R-16, además de la RT-2 de Rodalies.
El servicio por carretera funcionará mientras duren las obras de adaptación al ancho internacional del túnel de Roda, que está previsto que se prolonguen durante más de cinco meses. El plan de Adif fija el día 2 de marzo de 2025 como fecha para la finalización de los trabajos, por lo que, ahora mismo sobre los papeles este es el día en el que podrá desmontarse el dispositivo de transporte alternativo, que ahora está acabándose de concretar.
El operador Renfe ha adjudicado este contrato por valor de 29,2 millones de euros (IVA incluido), siendo la contratación más elevada de la historia por una obra programada. La cifra se incrementó en un 35% respecto a la primera licitación, después que esta quedó desierta.
Falta de conductores
Tras esta revisión de los precios, un grupo de empresas del sector decidió constituir esta UTE, que ahora dispone de escasas cuatro semanas para preparar toda la logística que comportará montar el servicio. Uno de los aspectos que preocupa más a las compañías es la dificultad en encontrar conductores, teniendo en cuenta que el sector del transporte por carretera hace tiempo que ha activado las alarmas por la falta de profesionales.
«También los habrá que vendrán de fuera», aseguró Vallcorba. Las compañías confían en que la administración coopere en este proceso, ya que tendrá que prepararse toda la logística para que estas personas puedan establecerse. «Si no nos ayudan veremos qué pasa, porque habitualmente este es un proceso con muchos palos en las ruedas», reconocía el presidente del Grup Plana.
Vallcorba confirmaba que este será un tema que tendrán que resolver las empresas de forma precipitada, mientras siguen concretándose los diferentes aspectos del plan de transportes alternativo, que se presentará el viernes.
Pendientes del plan
La reunión, prevista en la subdelegación del Gobierno en Tarragona, contará con la presencia de representantes de Adif y Renfe, además de la Generalitat, la Diputació de Tarragona, los consells comarcals y los alcaldes de los municipios afectados por el corte de vías.
Precisamente, estos últimos días se han intensificado los contactos con los representantes municipales, ya que los esfuerzos se centran ahora en concretar la letra pequeña del plan. Este hace referencia a la ubicación concreta de las paradas de los autobuses o la habilitación de espacios para que los usuarios del tren puedan llegar en coche, en puntos que se prevé que tendrán una fuerte demanda, como puede ser la estación de Sant Vicenç de Calders.
Este lunes, este rotativo publicaba las opciones que se ofrecerán para los usuarios de la ciudad de Tarragona, teniendo en cuenta que, para los usuarios que tengan que hacer transbordo tren-autobús o autobús-tren llegarán a la estación ferroviaria; mientras que los viajeros que inicien o finalicen su trayecto en autobús en esta ciudad lo harán desde la terminal de buses de la plaza de la Imperial Tarraco (Battestini).
En paralelo, las empresas del sector del transporte por carretera continúan sus conversaciones con el Departament de Territori de la Generalitat, para incrementar el número de frecuencias directas de la conexión en autobús entre Tarragona y Barcelona, evitando pasar por el aeropuerto.
De momento, el Ejecutivo de Salvador Illa no ha dado a conocer qué hará al respecto, como tampoco se ha pronunciado sobre la posibilidad de que los viajeros del Camp de Tarragona puedan tener el título de transporte T-10/120.