El pueblo chileno y la ciudad de Tarragona volvían a poner de manifiesto los lazos que los unen, en un doble homenaje que se celebró ayer en el Camp de Mart, en el que se reivindicó las figuras del expresidente Salvador Allende y del cantautor Víctor Jara.
Este año la conmemoración fue especial, coincidiendo con el cincuenta aniversario del golpe de estado y el inicio del proyecto ‘Mil guitarras’, que quiere poner en valor la figura del cantautor, asesinado en manos de los militares.
El acto sirvió para recordar los lazos que unen ambos pueblos, con personajes como la poetisa Montserrat Abelló y el exalcalde de la ciudad Joaquim Fort, ambos exiliados en el país andino durante la dictadura.
«Ahora su hijo vive en Tarragona y también hay gente de la Associació Allende que ha padecido la represión que hubo durante el golpe de estado», decía Paula Varas, en representación de esta entidad.
En su intervención el portavoz del colectivo, Francisco Javier Alvear, ponía en valor la comunión del pueblo chileno con esta ciudad «una de las pocas» que tiene dos bustos del expresidente en su vía pública. Asimismo, este lamentaba que a lo largo de la historia la figura de Salvador Allende «no ha sido suficientemente estudiada». «Era un demócrata profundo que creía firmemente en la democracia. Un socialista, demócrata y revolucionario», apuntó.
Como no podía ser de otra forma, la música fue protagonista durante el acto, con la interpretación de dos piezas como ‘Te Recuerdo Amada’ o ‘El derecho a Vivir en Paz’, dos de las piezas icónicas del extenso repertorio de Víctor Jara.
Su interpretación fue a cargo de la Tarragona Street Orquestra, una banda formada por músicos de diferentes nacionalidades que empezó sus ensayos hace cuatro meses y que ayer debutaba por primera vez en público esperando poder tener más protagonismo en la actividad cultural de la ciudad.
Entre estos había el guitarrista chileno José Luis Cumian quien aseguraba que Víctor Jara representa «un revolucionario que es referencia a nivel mundial». Cumian reivindicaba «recuperar su legado» para instaurarlo en la conversación pública y los foros sociales. «Su canción cada día tiene más vigencia, ya que las injusticias sociales desgraciadamente todavía siguen existiendo», manifestaba.
El acto fue presidido por el alcalde de la ciudad, Rubén Viñuales, quien durante su intervención aseguró que «Salvador Allende no es patrimonio de Chile, sino de la democracia y de la humanidad». «Hay personajes que nacen para cambiar el mundo», decía, mientras añadía que «la semilla que sembró fructiferó».
El Ayuntamiento, los partidos políticos y los representantes sindicales del territorio depositaron un ramo de flores en el busto del expresidente. También participaron algunas entidades como el Ateneu de Tarragona, la Asociación Centroafricana y la de Nigerianos. Especialmente cálido fue el aplauso que se llevaron los representantes del pueblo marroquí, que vieron como antes de empezar el acto el público asistente mantenía un minuto de silencio en respeto a las víctimas del terremoto que asoló el país el pasado sábado, y que ya suma más de 2.000 víctimas. Y es que Chile conoce de primera mano el dolor y el sufrimiento que provocan los terremotos, por lo que ayer no pudieron dejar de compartir el pésame.