Es cierto que estas no van a ser unas fiestas de grandes celebraciones, pero seguro que estas fechas nos acercan pequeños grandes momentos alrededor de la comida. Y los viviremos de una manera tan especial, que por mucha distancia que nos separe, vamos a sentir que estamos juntos. Porque no hace falta hacer grandes planes para acercarnos a quienes más queremos, ¡y aquí te traemos algunas ideas!
1. Aprende esa receta familiar que tanto te gusta.
No sabemos si será una receta de carne, de pescado o un postre, pero ¿por qué no aprender a hacer ese plato estrella que prepara tu tío y que tanto te gusta comer? Eso sí, te aconsejamos que solicites la supervisión del experto o experta en cuestión.
2. ¿A quién le apetece una taza de chocolate caliente y espesito?
Seguro que ya te estás imaginando la escena: tú, una taza de chocolate bien caliente, y una peli navideña en la tele. Y, si además te animas a prepararlo de manera casera con tu chica… ¡de repente tienes una tarde de planazo!
3. ¡No subestimes la diversión que puede ofrecerte una galleta!
Hoy se lía… ¡en la cocina! Porque hacer galletas navideñas con formas de casa, de árbol o de muñequito, es sinónimo de pasártelo en grande con tu familia. Eso es así.
4. ¡Empieza una tradición culinaria!
¿Por qué no? Aprovecha estas fiestas para hacer trabajo de investigación y descubre recetas navideñas que te sientas capaz de cocinar. Luego preséntalas a tus comensales y si triunfa… ¡te la pedirán cada año por Navidad!
5. ¡Sube el nivel de tus tablas!
La Navidad es su momento del año, así que empieza a empaparte de cómo se preparan las mejores tablas de quesos, de patés, de embutido o de turrones, y haz que los tuyos empiecen comiendo por los ojos.
