Un hombre que recogió en Tarragona un cargamento de 17 kilos de cocaína que había llegado al aeropuerto de Barajas en el interior de un cilindro metálico ha sido condenado a seis años y dos meses de prisión y a pagar una multa de 1.455.501,88 euros
De esta manera, el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJCat) corrige la decisión tomada por la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Tarragona, que había fijado la pena de prisión en cuatro años.
El 19 de noviembre de 2021 entró en el Aeropuerto de Madrid-Barajas un envío procedente del aeropuerto de Santa Cruz de Bolivia. Declaraba contener un cilindro hidráulico de alta presión –260 BAR–. Figuraba como destinatario una empresa situada en Vilanova i la Geltrú.
La inspección
Por parte de agentes de Policía Judicial de la Guardia Civil de Barajas, se realizó una inspección del envío, previa autorización de la Administración de la Aduana del aeropuerto. Se realizó una toma de muestra, que arrojó un resultado positivo en cocaína. Ante ello, se solicitó al Juzgado de Guardia la entrega vigilada de la mercancía, previa sustitución de la sustancia estupefaciente.
El día 20, el Juzgado de Instrucción 24 de Madrid autorizó la entrega vigilada del envío. Se procedió a su apertura, en cuyo interior fueron hallados 17 envoltorios de forma cilíndrica, que contenían una sustancia de color blanco. Una vez analizada resultó ser cocaína, con un peso neto de 17 kilos y de una pureza del 83,8 por ciento. Su valor de venta era de 1.867.130,91 euros.
El cargamento llegó al aeropuerto de Barajas y su teórico destino era Vilanova i la Geltrú
Finalizada la extracción, se cerró el cilindro sin la droga en su interior. Sobre las 13.30 horas, el envío fue recogido por un camión, iniciando la marcha en dirección a la autovía A-2, hacia Zaragoza. Fue seguido en todo momento por agentes de la Guardia Civil. Contaban con la información que facilitaba el dispositivo de geolocalización que se había instalado en la carga, con autorización judicial.
Al llegar a la altura del kilómetro 72 de la A2, el camión se averió. La carga fue trasladada a otro camión. Finalmente, a las 14 horas del día 23 llegó a una nave situada en el Camí Vell de Salou, en el término de Tarragona. Allí fue recogido por el acusado, un hombre de nacionalidad albanesa, quien no figuraba como destinatario del envío, ni consta que hubiese intervenido en la operación previa. Fue detenido en este momento.
Otro, absuelto
Otro acusado –y que fue absuelto– se encontraba en el lugar a bordo de un turismo Audi A3, marchándose del sitio al advertir la presencia policial, regresando a las tres de la tarde y fue detenido.
La Audiencia Provincial acusó al ciudadano albanés de un delito contra la salud pública en grado de tentativa. Ante ello, la Fiscalía presentó un recurso de apelación ante el TSJCat. Para este tribunal, el hecho de que el cilindro fue «recepcionado» en la nave de Tarragona por parte del acusado que se «encontraba en el interior de la nave para la recogida del envío» hace que el delito sea consumado.
