Agentes de la Policía Nacional practicaban a última hora de la mañana de ayer las primeras detenciones por una presunta violación grupal a dos menores, de 14 años, por un grupo de entre diez y doce jóvenes, también menores de edad, ocurrida el pasado domingo en Logroño.
El suceso, según las primeras informaciones que han trascendido del caso, tuvo lugar en el número 16 de la avenida de Navarra de la capital riojana. Un edificio de viviendas en el que, tal como comentaban ayer algunos vecinos de la zona, son habituales las reuniones de grupos de jóvenes que residen en este barrio, situado a las puertas del casco antiguo de Logroño.
En el mencionado inmueble, según fuentes de la investigación, habrían quedado las dos menores con sus supuestos agresores a última hora de la tarde-noche del domingo y una vez en el interior, habrían sido abordadas por entre diez y doce jovenes que en ningún caso superarían los dieciséis años. De hecho, algunos de los implicados, sin que haya trascendido cuántos, tendrían menos de 14 años y, por tanto, inimputables, por lo que habrían quedado bajo la tutela de sus padres.
Alrededor de las 21 horas, y una vez consumada la presunta violación grupal, una de las adolescentes relató lo que acababa de suceder a los agentes de la Policía Local que se encontraban en la zona.
De inmediato acudieron a la zona hasta tres patrullas que se encargaron de identificar a los supuestos agresores, algunos de los cuales aún se encontraban en el interior del inmueble. El amplio dispositivo policial y el numeroso grupo de jóvenes presentes en la zona alertó a los vecinos que comenzaron a concentrarse en torno al portal del número 16, uno de los edificios más antiguos del lugar en el que son habituales las pintadas y en el que ayer mismo se acumulaban varios desperdicios, como botellas, tetrabrick y papeles, entre una sillita de niño y un patinete.
Tras la identificación, los agentes de la policía local comparecieron en la comisaría de la Jefatura Superior de Policía, competente en este caso, para narrar lo sucedido y lo que las menores les habían trasladado.
Lo ocurrido, que a última hora de ayer se encontraba todavía en fase policial y sin que hubieran sido notificados los hechos al Juzgado de Menores, está en manos de la Fiscalía de Menores, que son los encargados de instruir los casos contra jóvenes de entre 14 y 18 años de edad. Y como todas las causas que afectan a menores, el suceso de avenida de Navarra se encuentra bajo secreto de sumario.
Varios de los residentes de la zona aseguraban ayer a este diario que eran frecuentes las reuniones de menores en el inmueble donde supuestamente ocurrieron los hechos, pese a ello no era habitual que se registrara ningún tipo de altercado ni incidentes destacables. Lo cierto es que también es una zona en la que, según los mismos vecinos, la presencia policial es constante.
La última vez que se denunció una agresión sexual grupal en La Rioja fue en 2018. Entonces, una menor de unos 15 años, aseguró que había sido violada por un grupo de jóvenes en el interior de un cuarto -un chamizo- en Calahorra, como parte del macabro juego de la ballena azul. Poco después, el juzgado archivó el caso ante la inconsistencia de las declaraciones de la presunta víctima.