Una clínica auditiva, un comercio especializado en productos gourmet de chocolate o un comercio que crea joyas de diseño propio son tres ejemplos de los seis proyectos que pasaron a la fase de incubación de la segunda edición del Programa d’Incubació Estratègica per al Petit Comerç, Serveis i Restauració de la concejalía de Empresa i Ocupació de Reus.
El programa municipal, que asesora a empresarios, acogió en su fase inicial a 13 proyectos, y ahora un grupo de profesionales expertos les diseñará a estos emprendedores, que superaron la prueba, un programa a medida basándose en sus necesidades. La meta es seguir avanzando.
De estos seis proyectos, uno de ellos ganó un premio: la creación y edición de un vídeo promocional de su empresa. El negocio afortunado fue elegido en relación con el grado de definición y concreción de la idea empresarial presentada y se trata de Clinicaudio, con la audióloga Isabel Moreno al frente.
La formación y asesoramiento del programa la han ayudado: «Te da herramientas y contactos que pueden serte útiles». Con una experiencia de 17 años, Moreno ha emprendido por su cuenta tras haber estado en una multinacional y ahora se centra en la «prevención y corrección auditiva». «Busco la satisfacción del cliente, que puede derivar en recomendación. Hay que crear una red entre comerciantes y apoyarnos ayudándonos entre todos», sostiene la audióloga, quien desde su comercio «visibilizo a otros negocios a través de una pantalla».
Malena Noni, de Menemu –comercio de creación de joyas de diseño propio– es otro ejemplo de empresaria: «Soy arquitecta y al quedarme sin trabajo entre 2008-2010 experimenté con la bisutería, incorporé mis conocimientos de arquitectura en la joyería y tras ir a ferias y obtener buenos resultados, monté un taller en casa, que fue creciendo; y con la Covid, vi que necesitaba sede física».
La personalización del trabajo es la base de la tarea de Noni. «En el programa, he conocido a gente de variadas profesiones y en mi misma situación y he podido averiguar cómo atraer clientela a mi negocio». María Ventura, del comercio de productos gourmet de chocolate y regalos con packaging original, Amelie Gourmet, cuenta que su trabajo «requiere investigar, buscar a proveedores, algo en lo que siempre innovo, busco dulces de calidad y de fuera, de África y Europa».
Una de las estrategias por las que apuesta Ventura para atraer a clientes a la tienda ha sido colaborar con una emprendedora especialista en arteterapia: «Surgió hacer talleres creativos en la tienda, donde los asistentes se inspiren probando dulces y creando, ya sea pinturas, un collage o un patchwork, etc.».
Según el concejal de Empresa i Ocupació en funciones, Carles Prats, los programas de incubación son «una de las novedades de este año en los servicios que ofrecemos».
Tanto la primera edición, centrada en la economía social y solidaria, como esta segunda, «han funcionado muy bien, con proyectos vinculados a la creatividad, la innovación y el compromiso social». Al ser un grupo «muy participativo y colaborativo, han surgido alianzas entre los servicios y comercios».