El futuro sistema de bici compartida de Reus ya tiene nombre, imagen y fecha de inicio. Se llamará Ganxeta, tendrá el color mostaza de los autocares de Reus Transport y empezará a rodar en octubre de este año 2023. Así lo han anunciado este mediodía la vicealcaldesa, Noemí Llauradó, y la concejala de Mobilitat, Marina Berasategui, quienes también han presentado la imagen de la marca, con una grafía redondeada, «que recuerda a una bici y también a la estructura viaria de la ciudad», ha explicado Berasategui.
El proyecto ya está encarrilado para que pueda ser una realidad en poco más de medio año. Y es que los cinco lotes para que el sistema se materialice ya están adjudicados. Se trata de la adecuación de un espacio anexo al parking Sant Ferran como taller, el suministro de 250 bicicletas, 21 estaciones y 483 anclajes, su instalación, y el sistema informático.
En estos momentos, las bicicletas ya están en proceso de fabricación y se está acabando de equipar el taller, el centro neurálgico del servicio de mantenimiento y funcionamiento de las bicis. Por otro lado, este mes de marzo se iniciará la obra civil de construcción de las estaciones. La primera será en la avenida Cardenal Vidal i Barraquer y, progresivamente, se irán construyendo las veinte restantes por toda la ciudad.
A este punto se llega después de prácticamente un año de prueba piloto interna que ha permitido validar aspectos como el funcionamiento, la comunicación entre las estaciones y el centro de control central o la fiabilidad de los vehículos. Todo ello se ha realizado con un prototipo de bici muy similar a la que acabará siendo el definitivo.
A través de una aplicación
Cuando la bici compartida entre en funcionamiento, los usuarios tendrán que registrarse previamente en una aplicación móvil, que regulará todo el funcionamiento. Una vez hecho este paso y accedan a la app, podrán consultar a tiempo real la ubicación y disponibilidad de todas las bicicletas en cada estación. Con la aplicación podrán reservar un vehículo y, finalmente, retirarlo y empezarlo a usar.
El precio será de un euro diario, pero también habrá un abono mensual de 9 euros. En cuanto al horario, el servicio estará disponible de ocho de la mañana a diez de la noche. Así queda fijado en el proyecto y reglamento, documentación aprobada en el último pleno del Ayuntamiento junto al estudio de viabilidad económica y la memoria justificativa. Inicialmente, el sistema contará con 250 bicicletas y en una segunda fase, se incorporarán hasta 250 bicis más. «Pero esto será a al menos tres años vista», ha aclarado Noemí Llauradó.
La implantación de la Ganxeta supone una inversión de 2,4 millones de euros. Como ha recordado la vicealcaldesa, cuenta con financiamiento europeo a través de los fondos Next Generation. A partir de aquí, el coste anual del servicio será de unos 300.000 euros.