La Guàrdia Urbana de Reus ha impuesto un total de 516 multas a usuarios de patinetes eléctricos por circular por la acera o zonas peatonales en los últimos ocho meses.
La policía local empezó a sancionar desde el pasado 30 de julio cuando entró en vigor la Ordenanza de Civismo. Según la nueva regulación, los patinetes eléctricos y demás vehículos de movilidad personal (VMP), al igual que las bicicletas no pueden circular por aceras y zonas peatonales; y en consecuencia, sólo pueden circular por las vías expresamente autorizadas, que son: calzadas, carriles bici y vías de velocidad 30. Tampoco está permitido conducir con los auriculares puestos o bien con dos personas en el mismo patinete.
Cada vez son más las personas que utilizan este vehículo para desplazarse por la ciudad, sobretodo los jóvenes. En 2020 la Guàrdia Urbana levantó 355 actas a vehículos de movilidad personal por incumplir la Ordenanza de Civismo y en 2021, han sido 161.
No cumplir con la normativa supone una infracción leve, y dependiendo del grado pueden llegar a ser de hasta 600 euros. Circular con casco en patinete eléctrico no es obligatorio, pero sí que es muy recomendable, según la Guàrdia Urbana.
Formación a los jóvenes
Dolores Vázquez, concejala de Seguretat, Convivència i Civisme recuerda que «la movilidad en patinete eléctrico y otros vehículos de movilidad personal, al igual que la movilidad en bicicleta, es una opción de futuro: Es una apuesta por la movilidad sostenible, que debemos gestionar adecuadamente para que también sea una movilidad segura».
La edil explica que la Guàrdia Urbana lleva a cabo una doble tarea para facilitar la adaptación de este nuevo medio de transporte: «la formación, con el programa de educación vial que hacemos a institutos, y la sanción, como con el resto de usuarios de vehículos que no hacen un uso correcto».