En los últimos años la lucha de las mujeres -y de toda la sociedad- por avanzar hacia la igualdad ha conseguido grandes avances, aunque es evidente que queda todavía mucho camino por recorrer. Un proceso que, y esto también ha quedado claro, va por barrios, puesto que los estándares de igualdad (o de desigualdad) son distintos en cada ámbito o sector profesional. En la industria química, las mujeres que desarrollamos nuestras carreras profesionales nos enfrentamos a una serie de estigmas, algunos de los cuales siguen vigentes a pesar de los significativos avances conseguidos últimamente.
A pesar del gran incremento de mujeres en nuestro sector, en particular en posiciones técnicas, todavía persisten demasiados marcos mentales que dificultan nuestro acceso a cargos de responsabilidad, un mal endémico que también afecta a otros sectores. Se trata de un tipo de discriminación casi invisible, porque no es explícita, pero es inevitable inferirla si damos un vistazo a estos cargos en las principales empresas del clúster petroquímico de Tarragona, que presume de ser el más importante del sur de Europa.
A pesar del gran incremento de mujeres en nuestro sector, todavía persisten demasiados marcos mentales que dificultan nuestro acceso a cargos de responsabilidad
La cantidad de mujeres que, rompiendo barreras y autolimitaciones, se han ido incorporando a este sector en los últimos años ha experimentado una progresión exponencial, un fenómeno que no se ha traducido en este empoderamiento en los ámbitos directivos.
Desde el Sindicato de Trabajadores asumimos el reto de romper este techo de cristal invisible como una de nuestras prioridades en un sector históricamente muy masculinizado pero que debe integrar este cambio de paradigma dentro de sus retos de transformación que actualmente afronta.
La presencia de la mujer en la industria química y del refino no solo es necesaria, sino que además es beneficiosa, ya que aporta una visión distinta y complementaria en la toma de decisiones y en el desarrollo de proyectos. Además, la igualdad de género en el ámbito laboral es un must en la responsabilidad social de las empresas que quieran seguir formando parte de un planeta que avanza necesariamente hacia el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible fijados por la ONU, que no solo hablan de la protección del medio ambiente, sino también de la igualdad en términos de género.
La presencia de la mujer en la industria química no solo es necesaria, sino que además es beneficiosa, ya que aporta una visión distinta para tomar decisiones y desarrollar proyectos
Seguir siendo el polo petroquímico más importante del sur de Europa implica muchas cosas. Pero también, y además de la competitividad, la descarbonización o el desarrollo de productos de más valor añadido, es necesario interiorizar retos como el de la igualdad de género para poder posicionarse ante la opinión pública como un sector moderno al servicio de la sociedad. Que es lo que somos.
