¿Para qué queremos una área metropolitana?

11 abril 2025 07:05 | Actualizado a 11 abril 2025 07:07
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Lo mejor es enemigo de lo bueno. Es cierto. Las contundentes declaraciones del alcalde de Tarragona, Rubén Viñuales, respecto a la ubicación de la futura estación intermodal, que hasta nuevo aviso, se plantea ubicar en Vila-seca, han abierto la primera gran crisis en el proyecto de área metropolitana.

La cascada de reacciones ha sido mesurada, porque a nadie le interesa ser señalado como el culpable de un enésimo fracaso. Pero la tensión es evidente y el problema es real. Es cierto que el error histórico que supuso que una capital como Tarragona no tenga Alta Velocidad, es algo que deberíamos intentar no repetir. Hay que informarse muy bien sobre los motivos que llevaron a situar esa estación (que hoy tiene más de un millón de usuarios) para no volver a repetirlos. Pero también es cierto que pacta sunt servanda, y que si quieres reabrir el debate, es necesario hacerlo en el modo y en los tiempos que te permitan obtener el resultado que buscas.

El área metropolitana debe servir para proponer soluciones y permitir el debate. Lo mejor es a veces enemigo de lo bueno

El concepto de «lealtad» es fundamental en política y en la vida. Pero que el árbol no nos impida ver el bosque: la estación intermodal en la Horta Gran tiene toda la justificación teórica. Es la gran área de crecimiento, en Tarragona viven más de 140.000 personas y tiene intenciones de seguir creciendo. Por tanto de las preguntas iniciales la respuesta es clara: Tarragona es dónde debería estar esta estación. Pero en la vida, la teoría y la práctica a veces se conjugan mal. El área metropolitana debería servir para poder coser el territorio, ha de servir para que «en tierra de nadie» no tenga sentido, porque si cosemos bien el territorio, la visión metropolitana nos ha de permitir poder ir de un lugar a otro con facilidad, con seguridad y con tranquilidad. Para eso ha de servir el área metropolitana.

Toda crisis es una oportunidad y esta primera -primeriza- crisis de identidad ha de servir para cuestionarse bien para qué hacemos las cosas, cuál es el objetivo final. Si solo ha de servir para que continúen las mismas tensiones de siempre, mejor dejarlo correr, porque ya ni nos asombran, és más de lo mismo. Pero si el área metropolitana es real, debe saber solucionar este reto, abrir un debate, proponer soluciones. Lo mejor puede ser enemigo de lo bueno, pero lo bueno tiene que ser bueno de verdad para la gente, no solo para los políticos.

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