Economía azul: ¿oportunidad o fiasco?

09 octubre 2024 21:01 | Actualizado a 10 octubre 2024 07:00
Comparte en:

La economía verde, la economía circular. Diferentes maneras que tienen los economistas de proponer visiones de modelos ecónomicos que permitan la sostenibilidad y la creación de riqueza. A ellos se le une la economía azul. En 2010, el economista belga Gunter Pauli popularizó este concepto en su libro The Blue Economy. La idea principal de Pauli es desarrollar procesos productivos que imiten el funcionamiento de la naturaleza, es decir, que se aprovechen al máximo los recursos utilizados, que los residuos generados sean escasos o, que, en caso de producirlos, se transformen en materias primas para crear nuevos productos. En realidad la economía azul busca la eficiencia, aprovechando los recursos disponibles sin que el precio de los costes se incremente ni para las empresas ni para los consumidores.

La economía azul pone sobre la mesa la oportunidad que genera el sector económico que trabaja en el mar o con el mar o desde el mar

El concepto se usa especialmente para los sectores económicos que dependen del mar, ya sean de explotación de recursos -como la pesca o minería-, producción de energía, transporte marítimo o turismo. Se trata que reduzcan su impacto negativo en el medioambiente y se transformen en alternativas sostenibles. Dar un papel a los mares como fuente económica y gestionar sus recursos de una forma eficiente, restaurando los ecosistemas dañados e introduciendo innovación que permita un aprovechamiento sostenible en el futuro. Precisamente la tecnología, de la mano de la investigación, es un potente aliado. En los últimos años han surgido soluciones orientadas a la limpieza de basuras y vertidos en el mundo marino.El principal obstáculo que tenemos es la «desconexión» de los diferentes agentes dedicados a la economía azul. Se trata de un sector muy amplio y heterogéneo y no siempre se sabe lo que se está haciendo en tu propia ciudad o en tu provincia. Si logramos ponerlos en contacto y dejamos de buscar fuera lo que tenemos en casa, podremos aspirar a proyectos más grandes.En Tarragona el mar es una ralidad incontestable desde las terres de l’Ebre hasta el Baix Penedes. Si sabemos aprovechar las potencialidades y llevar a la practica la míriada de ideas sobre la mesa, la economía azul está llamada a ser fundamental en el futuro de nuestras comarcas. Sino pasará a ser una idea más, de las mil que flotan en las mesas de los despachos. Una lástima.

Comentarios
Multimedia Diari