El comercio electrónico se dispara en el sector logístico. Los meses de estado de alarma han supuesto una aceleración sin precedentes en el uso del e-commerce por parte de los consumidores, muchos de los cuales tuvieron durante las semanas de confinamiento sus primeros contactos con él.
Un reciente estudio divulgado por la empresa de registro de dominios y alojamiento web GoDaddy señala que un 30% de las pymes y autónomos españoles hubiesen querido contar con un comercio electrónico antes del estallido de la pandemia. La realidad es que solo un 7% tiene hoy en día una web con canal de venta o tienda online abierta y apenas un 3% oferta sus productos en un Marketplace.
Pero los que ya estaban ahí han aprovechado, y mucho, el tirón que ha experimentado este sector. En el caso de la demarcación de Tarragona, con una importante industria logística (en especial, en el Camp de Tarragona), ese tirón se ha traducido en contrataciones. Lo ejemplifica Vanessa Álvarez, directora de la oficina en Reus de Quality ETT, con el caso de uno de sus clientes: un comercio online de productos para el hogar.
«Durante la primera semana de la pandemia -explica Álvarez-, en esta empresa tenían una persona trabajando a través de nuestros servicios de ETT. Pero en cuanto pudieron empezar a trabajar, después de que el Gobierno decidiese que se permitía el comercio electrónico, cada día se incorporaban seis nuevas personas a su plantilla, básicamente mozos de almacén. Estaban desbordados».
"La ‘campaña de la pandemia’ ha sido más fuerte que la temporada alta de Navidad" (Vanessa Álvarez, Quality ETT)«Cuando empezó la pandemia estaban en temporada baja -prosigue Álvarez-, porque su temporada alta es en Navidad, y nunca hubiesen previsto que los pedidos de sus productos se incrementasen tanto. Entre abril y mayo, las ventas de esta empresa se cuadruplicaron respecto a los mismos meses del año anterior. La ‘campaña de la pandemia’ ha sido más fuerte que su temporada alta de Navidad».
Vanessa Álvarez apunta algunas razones: «Creemos que ha habido mucho consumidor nuevo que ha probado por primera vez el e-commerce, que ahora está satisfecho con ello y que ha afianzado este tipo de compra, con lo que estos comercios electrónicos han ganado mucha clientela que hasta ahora no tenían».
Crecimientos del 400%
De la misma opinión es Marta Simón, directora de operaciones de FM Logistic Ibérica, perteneciente a la multinacional francesa familiar FM Logistic Group, con centros de trabajo en el Camp de Tarragona, en los municipios de Bellvei (Baix Penedès), Puigpelat y Valls (ambos en el Alt Camp): «El consumidor ha cambiado su comportamiento. De cara al año 2021 va a haber un crecimiento del comercio electrónico del 25% y los grandes retailers se están preparando para este ‘boom’», explica.
«El comercio electrónico ha venido para quedarse -prosigue esta profesional de la logística-, con una aceleración similar a la que ha sucedido con el teletrabajo». En el caso de FM Logistic, el buen comportamiento del comercio electrónico a lo largo de estos meses de Gran Reclusión les ha permitido no solo mantener la plantilla que tenían antes del estallido de la pandemia, sino incrementarla sustancialmente en algunos casos.
La Gran Reclusión ha hecho que nuevos perfiles de comprador entrasen en el mundo de la compra online. Los expertos señalan que ya no habrá vuelta atrás en una aceleración que ha ‘quemado’ etapas de golpe.«Con el cierre de las tiendas físicas de nuestros clientes -explica Marta Simón-, reconvertimos a la gente a trabajar en e-commerce, llegando a duplicar plantilla». Los tres centros de trabajo que FM Logistic gestiona en el Camp de Tarragona emplean actualmente a un millar de personas. Valls, con 800 trabajadores del total, es el centro logístico con más personal de los tres que manejan en esta empresa en las comarcas del sur de Catalunya.
«En Valls -explica Marta Simón- hemos tenido un crecimiento del e-commerce del 400%, lo que ha supuesto duplicar la plantilla específica dedicada al comercio electrónico, con 450 personas dedicadas en exclusiva al e-commerce de las 800 que tenemos».
«Ha sido un crecimiento gradual -explica Marta Simón-, duplicando espacios y plantilla. Tras la declaración del estado de alarma hubo unos días de incertidumbre, pero llegada la cuarta semana, el crecimiento de la logística para e-commerce ya era de entre el 300% y el 400%. En apenas cuatro semanas».
Prevención
Gestionar tasas de crecimiento así de grandes en las plantillas mientras se manejan plazos de tiempo tan cortos, de apenas semanas, y sin un periodo de preparación previo (a diferencia de campañas ya conocidas como Black Friday o Navidad) no solo ha sido un reto para las organizaciones en materia de captación y retención de talento, sino que además ha tenido que hacerse implementando a toda velocidad medidas de protección para esos trabajadores.
"Los grandes ‘retailers’ se preparan para un ‘boom’ del comercio electrónico, que crecerá un 25%" (Marta Simón, FM Logistic Ibérica)La capacidad de adaptación y una buena planificación han sido clave y seguirán siéndolo. «Teniendo entre 700 y 800 personas en un centro de trabajo como el de Valls -explica Marta Simón- es de destacar que no hayamos tenido ni un solo contagio. Eso ha sido gracias a que somos una empresa con más de 30 medidas contra la Covid-19, que desde febrero ya estábamos metidos en un comité de crisis europeo, con mucha información que nos llegaba desde sedes en países donde el virus estaba castigando mucho».
«Fue en ese momento, en febrero, cuando dijimos: ‘Vamos a seguir apostando por el comercio electrónico, con seguridad de los trabajadores’, y nos ha ido bien. Dentro de 15 días prevemos que empezaremos a bajar el ritmo de contrataciones, pero aún así vamos a tener que seguir incorporando gente», prosigue Marta Simón.
Cambios en la ‘última milla’
Mozos de almacén y perfiles para picking han sido y previsiblemente van a seguir siendo los más solicitados en la logística especializada en comercio electrónico. Visto el comportamiento del sector a lo largo de estas últimas semanas, las grandes tendencias que auguran profesionales como Marta Simón son una adaptación de los grandes retailers (pónganle el nombre que quieran a esas tiendas de muebles suecos o de bricolaje francés y alemán) a los nuevos consumidores de comercio electrónico, donde «va a haber nuevos canales, porque los retailers no estaban tan preparados, pero no nuevos actores».
En apenas cuatro semanas de estado de alarma, la logística vinculada al comercio electrónico llegó a crecer un 400%, con una demanda sin precedentes de profesionales«Algunas tiendas físicas van a cerrar y se van a reorientar al comercio electrónico, y algunos grandes retailers van a abrir pequeñas tiendas en zonas urbanas, que servirán de escaparate de sus productos para que los vean, los prueben y hagan un pedido para que se los entreguen en casa. Pensábamos que era algo que iba a llegar en cinco años, pero ha acelerado. La gente ha descubierto que es muy cómodo, y encima te lo mandan a casa», prosigue.
«Donde sí van a entrar nuevos actores -vaticina esta profesional de la logística- es en la ‘ultima milla’, en la distribución. Se han multiplicado las peticiones de ‘última milla’ más ecológica, y va a haber grandes crecimientos en transporte de ‘última milla’, con aperturas de hubs más cercanos a las grandes ciudades».
En este último punto, el Camp de Tarragona tiene muchas opciones de captar esos hubs logísticos, como tercera corona del área metropolitana de Barcelona. «Es una zona que tiene mucho potencial -adelanta Marta Simón-, y nosotros la cotizamos a nuestros clientes mucho antes que Barcelona. El Camp de Tarragona está dentro de nuestras recomendaciones a clientes, porque creemos que tiene un potencial increíble».
