Una patrulla de la Policía Local de L’Ampolla, en labores de vigilancia rural, localizó el miércoles día 9 de noviembre, una construcción de chapa en una parcela ubicada en la partida del barranco del Sargento. La construcción tenía todas las características para albergar una plantación indoor y sospechosamente sería de marihuana.
La información se pasó a Mossos d’Esquadra, que activó a la Unidad de Investigación para cercionarse del descubrimiento. Tras verificar que la plantación era de marihuana, se procedió a la entrada y registro, localizando 800 plantas en diferentes fases de creicmiento y todos los elementos necesarios para su cultivo dentro de esa nave de chapa.
En la operación, se observó que en un punto de la nave había indicios de que alguien vigilaba el cultivo y se cuidaba de él, los llamados ‘jardineros de la marihuana’. Sin embargo, el día del decomiso no había personas en esta nave del barranco del Sargento.
Por esta razón, Mossos decidió montar un dispositivo de vigilancia para comprobar si en las horas posteriores al desmantelamiento alguien aparecía por la nave y poder darle caza. Al día siguiente, día 10, dos personas se presentaron en la nave y Mossos intentó detenerlos. Lo logró con uno, de 30 años y sin domicilio conocido en España y el otro se escabulló campo a través por una zona boscosa sin posibilidad de darle caza.
El detenido fue trasladado a Tortosa, sede de la Unidad de Investigación, y allí se le interrogó, dejándolo en libertad a las pocas horas acusado de un delito contra la salud pública. En estos casos, los ‘jardineros de la marihuana’ solo tienen conocimientos de las tareas de mantenimiento, pero ningún tipo de conexión con la cúpula que maneja el entramado del cultivo y tráfico de la marihuana.