Era el año 2017 cuando el Cadete A del Nàstic despertó el asombro de todos. Aquel conjunto dirigido por el actual técnico del primer equipo, Dani Vidal, logró conquistar el MIC de la Costa Brava, uno de los torneos nacionales más prestigiosos. Los granas derrotaron en la final al Espanyol con un doblete de Guillem Martínez. En aquella plantilla estaba uno de los jugadores más importantes del primer equipo en la actualidad como es Óscar Sanz, que tras marcharse cedido a Ebro y Unionistas ya es un fijo en los planes de Vidal desde el año pasado.
De aquello han pasado siete años y parece que aquel formidable equipo ha encontrado relevo. Se trata del actual Cadete A tarraconense compuesto en su mayoría por jugadores del año 2009. Una generación que ilusiona y que está escribiendo capítulos inolvidables para la cantera del Nàstic. Este pasado fin de semana lograba una de esas victorias que dejan huella.
El conjunto dirigido por Sergio Aleixandre derrotaba al Cadete A del FC Barcelona en la cuarta jornada de la categoría de División de Honor, la máxima a nivel catalán. Un triunfo brutal por 1-0 gracias a un tanto de Bruno Noriega. El equipo grana tumbaba a un Barça que acudía a la Ciutat Esportiva de Campclar con un bagaje de tres victorias en tres partidos y 13 goles a favor y uno solo en contra. Eran claros favoritos, pero se encontraron con un Nàstic que realizó un encuentro perfecto para sumar su segundo triunfo del curso.
¿Qué hace a este equipo tan fuerte en el presente y con tanto futuro por delante?
La respuesta nos la da su propio entrenador, Sergio Aleixandre, que atiende al Diari solo unos pocos días después de la machada: «Es un equipo que entrena muy bien. Tiene un hambre increíble y tenemos que regular los entrenamientos para prevenir lesiones. Es una generación con mucho talento».
Aleixandre está viviendo su primer año como entrenador en la cantera del Nàstic. Es profesor de Educación Física y este verano aterrizaba en Tarragona por motivos laborales. Mia Guasch, director del fútbol base, decidió entregarle las llaves de una de las mejores generaciones en los últimos años: «He estado en grandes canteras de Valencia como la del Levante. Mia contactó conmigo y confió en mí».
El entrenador valenciano aterrizó en la cantera del Nàstic y a los pocos entrenamientos ya comprobó que lo que tenía entre manos era un equipo especial. La pretemporada terminó de confirmar sus presagios: «Desde que cogemos el equipo hacemos una pretemporada con todo victorias excepto contra el Segre y eso nos dio mucha moral. Le ganamos a otros cadetes de División de Honor y a equipos juveniles».
Dos victorias y dos derrotas
Con la temporada ya arrancada, el Cadete A del Nàstic suma dos victorias y dos derrotas para un total de seis puntos, números que no corresponden a lo que se ha visto a lo largo de los cuatro partidos: «Vemos como está compitiendo el equipo y aunque parezca que a nivel de clasificación pueda ser mejorable, las sensaciones son que le podemos ganar a cualquiera. Sobre este planteamiento estuvimos trabajando toda la semana. Teníamos claro que el Barça era un equipazo, pero ellos también nos tenían que tener ese respeto».
El entrenador grana cree que hay jugadores de esta generación que podrían llegar al primer equipo: «No tengo dudas. La fortuna de haber entrenado en estas mismas categorías en otros equipos como Levante o Benicarló me da más perspectiva y veo ese perfil de jugador que tiene todas las posibilidades de llegar. Ya están cerquita, pero siempre hay unos determinantes que marcarán su futuro».
Marc Sardà, Holmes Junior e Ian Theilacker han sido convocados con la Catalana Sub-16 y son tres de los grandes talentos del equipo, aunque su entrenador alaba a todos: «Muchos más jugadores del equipo pueden tener el premio de ir con la selección Catalana porque todos tienen mucho nivel». Ojalá sea así. Son el futuro del Nàstic.
