Javier ‘Cuco’ Bonilla (Soria, 32 años) vive su cuarta temporada. Quizás la más difícil de su etapa grana. Solo ha sido titular en uno de los 12 partidos de liga, pero su talento goleador no se ha resentido. Suma dos goles. El último dio los tres puntos ante el líder, Castellón. Pase lo que pase, mantiene la sonrisa. «¿Enfadarme? Imposible».
Cuco, Cuquino, Javi, Boni... ¿Cómo hay que llamarle?
Como quieras (risas).
¿De dónde salen todos estos nombres?
De ‘La que se avecina’. Con un amigo siempre hacíamos como Amador (uno de los personajes) y nos llamábamos: «Eh, Cuquino». Y a partir de ahí, todo el mundo.
Sea Cuco, Cuquino, Boni o Javi, siempre se sitúa entre los máximos goleadores de la plantilla.
Por suerte, intento aprovechar al máximo los minutos que me da el míster. Por mis características y jugando un poco más arriba, es más fácil meter goles.
Deje de lado la humildad. ¿Hay mejor lanzador de faltas en la categoría que Javier Bonilla?
No (risas). En serio, una de mis características es el golpeo. En eso sí que me considero bueno y lo intento aprovechar al máximo.
¿Dígame alguien que pueda ser mejor?
Con la zurda, por ejemplo Salva Ruiz, del Castellón que le pega muy bien. Seguro que hay más.
¿Es el año más complicado que está viviendo en Tarragona?
A la hora de tener minutos, sí. Es el año que menos he jugado.
¿Cómo lo gestionas?
Todo el mundo quiere jugar, pero no me puedo frustrar ni estar mal. No me serviría de nada. Entreno al máximo e intento aprovechar los minutos que me da el míster en el campo. A partir de ahí, yo no puedo hacer más. No puedo decidir los minutos que tengo que jugar, si de inicio o no.
¿Con la edad ha cambiado la manera de asumir la suplencia?
Lo llevo de la mejor manera posible. Jamás intento poner una mala cara. Sería una falta de respeto a compañeros que han jugado menos que yo. Tienes que trabajar al máximo para tener esos minutos. El míster decide y solo tenemos que ayudar al equipo desde la parcela que nos toca estar cada uno. Ganar es el bien del equipo.
¿Se está siendo injusto contigo en el reparto de minutos?
Puede ser que sí. Creo, no por mí, en general, que cualquier persona que dé el máximo, salga al campo y lo haga bien merece más. No depende de mí. Si fuera por mí, sería titular siempre.
Mediocentro, extremo, lateral, ¿Cómo le tengo que catalogar?
De todo. Con el sistema del míster actual juego más de extremo. Pero alguna vez también he salido de mediocentro. En lo que me necesite, me tiene. Me da igual la posición.
Se crió de extremo.
Antes había extremos más puros, de encarar y regatear. Ahora no hay tantos, pero cuando Machín me puso de lateral en el Numancia era porque yo no era de encarar, sino de meterme más por dentro. Entonces me dijo que me costaría tener un sitio en el extremo y me retrasó- Estuve muy cómodo como defensa y ahí me quedé.
Hasta que Toni Seligrat le dio el empujón para subir un peldaño.
Sí y ahora mismo prefiero jugar más arriba que de lateral. Que si tengo que salir de lateral, lo haré.
¿Por qué?
Me siento más cómodo en posiciones más adelantadas. Defiendes igual, pero no es lo mismo. De lateral sufro más porque me he acostumbrado a otra cosa. Llego más al área y es lo que más me gusta.
Qué estrés con tan solo 14 jornadas disputadas. ¿También dentro han vivido este tiempo con tanto tensión?
No. Nosotros intentamos llevarlo siempre con normalidad. Todo se basa en los resultados. Cuando no te van bien parece que las cosas no se estén haciendo bien. No es así. Hemos seguido la misma línea. Ahora los resultados nos vienen de cara y tenemos que aprovechar para acercarnos al líder.
Lleva muchos años en el Nàstic. ¿Esta situación de altibajos con la presión de ganar no es nueva?
Es muy difícil ganar 30 partidos de 38. Solo lo hacían el Barça o el Madrid en los mejores tiempos. Ni ahora. Es normal que el aficionado siempre quiera que el equipo gane. Pero es un juego y el rival también intenta ganar. Si haces las cosas bien, por plantilla, lo normal es que estés más cerca de ganar, porque tienes la mejor plantilla de la categoría. Pero es un juego y todo son detalles. El otro día, el Castellón tiene muchas ocasiones y no meten gol. Nosotros tenemos dos contadas y las metemos. Es un juego de errores y el que menos cometa o más sepa aprovechar los que del rival se lleva la victoria.
¿Es la mejor plantilla con la que ha jugado?
Podría ser una de las mejores. En Mallorca había mejor, en general. Fuimos muy superiores al resto. Desde el primer minuto de la primera jornada hasta el play-off. En esta, me da la sensación, que todos o casi todos los partidos, puedes jugar mejor o peor, pero nos sentimos ganadores.
¿Quizás eso sea lo que espera todo el mundo, arrollar?
Eso es muy difícil. Ganar tantos partidos. En el fútbol se iguala todo. Hay más vídeos, preparación física, etc. Todo está más profesionalizado y se igual. Mira Arabia Saudí o Japón en el Mundial. Puedes ser muy superior, pero en dos zarpazos se te ponen por delante y después remontar es muy difícil.
¿Cómo viviste Balaidos?
Jodido. Mira que la semana de antes lo pasamos bien. Pero fue por el cómo se dio. Si el Villarreal B te gana porque es muy superior, se les de la mano y ya está. Pero no fue así.
¿El héroe de ese partido para el Villarreal B está en el Mundial, Nicolás Jackson?
Y muchos en Primera División. Tenía un equipazo, pero ese día nosotros hicimos las cosas muy bien, para subir. No nos dejaron.
Siempre le veo sonriendo, ¿me cuesta imaginarle enfadado?
Imposible. Es muy difícil. No sé en qué. Nada. Con la de cosas que hay en el mundo como para enfadarme aquí. Me puede saber mal que no juegue, claro. Pero no de mala leche. Siempre intentar ayudar.