Con Aitana Bonmatí en su mejor versión, España hizo historia en Nueva Zelanda. Con un doblete de la centrocampista y tantos de Alba Redondo, Laia Codina y Jenni Hermoso, las españolas se impusieron ante Suiza y aseguraron el pase a los cuartos del Mundial femenino por primera vez.
La impecable actuación de Aitana, hilo conductor que conectaba sin descanso los dos extremos del campo, lideró el triunfo por 1-5 de la selección española frente a las helvéticas, en lo que supuso su tercera goleada en el torneo y la primera victoria en una ronda eliminatoria.
España hizo el deber de casa y ajustó los fallos que le costaron una derrota en su compromiso anterior. El equipo entró a la cancha con cinco cambios respecto al once previo, con Alexia Putellas de nuevo en el banquillo y el relevo de Misa Rodríguez por Cata Coll en la portería.
En la estrategia de reforzar el ataque le tocó Aitana, al lado de Teresa Abelleira y Jenni Hermoso, coordinar el medio de campo, mientras que Salma Paralluelo, Esther González y Alba Redondo comandaron la primera línea ofensiva.
Determinadas, las españolas iniciaron la cita con un fuerte ritmo y, pese a unos tropiezos iniciales, Aitana inauguró el marcador en tan solo cinco minutos, con un regate seguido de un golazo en la escuadra, tras un remate fallado de Alba.
Pero poco después Suiza consiguió el empate sin hacer ningún esfuerzo. Un pase muy mal calculado de la defensa Laia Codina terminó con el balón dentro de su propia portería y el marcador igualado.
Pese al golpe, La Roja, que hoy jugó de azul, no se dejó abatir. Mantuvo los pies en el suelo y mostró la sincronía que tanto se esperaba. Sus tradicionales pases rápidos pronto hicieron que el segundo gol llegara, esta vez de los pies de Alba en el minuto 17.
Una Aitana imparable condujo el juego y dictó el ritmo de un espectáculo futbolístico que combinó coordinación, motivación y, sobre todo, comunicación. Sin dar tregua para la portería de Gaelle Thalmann, la mediocampista anotó su doblete y amplió la ventaja en el minuto 36.
Nueve minutos después, Laia Codina se redimió y marcó el cuarto tanto para las españolas.
Con una anotación prácticamente cada diez minutos, España se fue al descanso con una ventaja de tres dianas en el marcador.
La muralla suiza ya se había venido abajo, pero Jenni Hermoso se sumó a la fiesta goleadora y selló un triunfo para la historia del fútbol femenino español.