El ABC de la hidratación

Consejos. Beber líquidos es fundamental para el organismo y para mantener un buen rendimiento físico y mental

23 julio 2022 08:13 | Actualizado a 23 julio 2022 08:27
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La hidratación es vital en cualquier época del año, a pesar de que en verano, con las elevadas temperaturas, beber agua constantemente es beneficioso para regular la temperatura corporal. El agua es un elemento imprescindible para el ser humano. Compone el 75% del cuerpo en los niños y el 60% en los adultos y también es fundamental para la realización de muchos procesos metabólicos del organismo. Hay que tener en cuenta que en el transcurso del día una persona suele perder en torno a los dos litros y medio de agua, cantidad que hay que reponer para que nuestro cuerpo mantenga su equilibrio.

Las altas temperaturas de verano hacen que la pérdida de agua sea mayor y que, por lo tanto, el riesgo de padecer una deshidratación también aumente, especialmente en los niños y las personas mayores, junto a las personas que desarrollan una alta actividad física bajo el sol, sea por trabajo o por la práctica deportiva. En este caso la pérdida de agua a través del sudor es más rápida y, en consecuencia, la deshidratación puede serlo también. Por eso, en estas situaciones, además de beber agua, debemos reponer los nutrientes y minerales expulsados con el sudor con bebidas isotónicas que ayudan a cumplir esta doble función.

El agua cumple la función de regular la temperatura corporal, que debe mantenerse entre 36 y 37 grados. También contribuye en el transporte a través de la sangre del oxígeno que necesitan los músculos y regula la presión arterial para el buen funcionamiento del corazón. Ayuda la digestión, absorción y circulación de los nutrientes para alimentar las células, al igual que la eliminación de los desechos que estas generan.

Las frutas y verduras, ricas en vitaminas y minerales, también son fuente de agua

Cuando hace calor o se realiza un ejercicio intenso, se evapora a través de la piel con el sudor. Nuestro cuerpo empieza a deshidratarse antes de empezar a tener sed, por ello, es preciso hidratarse constantemente, para asegurarnos de que el organismo se mantiene en buen estado, sobre todo en los meses de más calor. Si el organismo no tiene agua suficiente, todas las tareas se ven alteradas y el corazón tiene que trabajar con mayor intensidad.

Deshidratación

Es aquí cuando el propio cuerpo emite las primeras señales de alarma por medio de los síntomas iniciales de deshidratación: dolor de cabeza, cansancio, mareos o sed. Si no se repone el agua, los síntomas se agravan pudiendo causar confusión mental, desorientación, infartos e incluso la muerte. Por ello, las autoridades sanitarias recomiendan beber unos dos litros y medio de agua diarios e ir siempre con una botella encima para beber a pequeños sorbos continuamente.

La deshidratación tiene consecuencias nefastas sobre la salud y el rendimiento físico y mental para las personas. En el caso de una pérdida de líquido elevada, se recomienda especialmente el consumo de bebidas carbohidratadas, que permiten una rehidratación más rápida. Los expertos recomiendan a la hora de hacer ejercicio hacer una ingesta de líquido antes, durante (en cantidades moderadas) y después.

Se calcula que con una deshidratación del 2% en nuestro cuerpo, se reduce un 20% el rendimiento físico y hasta un 50%, en el caso de llegar a experimentar una deshidratación del 5%. Pero la hidratación no es únicamente imprescindible en los casos de practicar ejercicio físico intenso. Estar bien hidratado es fundamental para mantener un buen estado de salud.

Una correcta hidratación no solo influye en el cuerpo, sino también en la mente

Una correcta hidratación no solo influye en el cuerpo, sino también en la mente. La deshidratación causa una contracción del tejido cerebral afectando a la respuesta de nuestro cerebro a una actividad intelectual. Procesos mentales como la memoria, el aprendizaje o la capacidad de atención pueden disminuir por la falta de líquidos. Darle al cuerpo el agua que necesita es primordial para prevenir un posible golpe de calor y combatir la deshidratación. También es importante evitar estar expuesto al sol en las horas de más calor e ir por la sombra, en la medida de lo posible.

Comida y bebida

Hidratarse con agua es la mejor opción, a pesar de que también puedes alternarla con infusiones, zumos de fruta naturales, lácteos o bebidas vegetales. Es importante evitar las bebidas con gas y las alcohólicas, ya que producen un efecto diurético en nuestro cuerpo favoreciendo la deshidratación.

Comer verduras y hortalizas es beneficioso. Son alimentos ricos en agua y, en época de calor, es mejor tomarlas en platos fríos. La fruta también es una buena opción a cualquier hora del día. A lo que hay que añadir que son ricas en vitaminas y minerales, imprescindibles para la salud.

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