Por si la viña del Penedès no hubiese sufrido suficiente con la sequía, ahora aparece otra amenaza que hacía más de una década que no preocupaba se abate sobre los cultivos del Penedès.
Las altas temperaturas del verano han favorecido a la expansión del mosquito verde, un pequeño insecto que se ceba con los nervios de las hojas frenando su crecimiento. años no se había detectado con tanta virulencia.
Cuando el mosquito devora los nervios provoca que las hojas se sequen impidiendo la fotosíntesis y la maduración de las uvas incluso al desarrollo de la planta al año siguiente reduciendo la cosecha.
La Generalitat señala que actualmente es difícil valorar los daños. Según Sanitat Vegetal de Barcelona la plaga sería más intensa de lo que se cree a priori.
El mosquito verde se muestra con especial virulencia en el Penedès aunque también se ha detectado en las DO Catalunya, Tarragona, Montsant, Priorat o algo en la Terra Alta, Empordà o Conca de Barberà.
El insecto apenas mide entre 2 y 3 milímetros. Es de color verde claro y alas traslúcidas y salta de hoja en hoja aunque los adultos vuelan.
La uva tinta es la preferidas del mosquito pero también atacan a variedades blancas como el chardonnay o malvasía de Sitges, además de merlot o chardonnay. También en xarel·lo y pinot noir para elaborar espumosos. En estos dos últimos casos puede quedar afectación para el próximo año. Y las viñas están muy debilitadas por la sequía.
En el Penedès los agricultores de Gelida, Sant Llorenç d’Hortons. el Pla del Penedès o Sant Sadurní d’Anoia son los más afectados pero en el resto de la vegueria se está pendiente de la evolución de la plaga.
El problema es que el tratamiento es difícil y más si como en muchos de los campos del Penedès se apuesta por la agricultura ecológica que rechaza insecticidas químicos.