Es una lengua natural de agua que desemboca en el mar. De un gran valor natural y para la que hay proyectos de recuperación ambiental, la riera de Calafell es sin embargo un lugar donde los vándalos completan sus acciones sin sentido.
Hace unos días se ha realizado una limpieza del cauce para sacar todo tipo de residuos. Carros de supermercado, vallas y conos de obra, hierros y plásticos han aparecido en esa lengua de agua.
Más allá del vandalismo, la situación preocupa por la afectación para el medio ya que ese ecosistema es de gran importancia ambiental. En él pueden encontrarse especies vegetales típicas de ribera y son muchas las aves que se asientan en la zona.
Hace años que se plantea una recuperación de toda la zona entre el parque de Calafell Aventura junto a la estación de tren y la desembocadura en la playa. La intervención permitiría tener un paseo fluvial en un entorno natural pero que se ve amenazado por el vandalismo.
El Ayuntamiento señala que con las cámaras de seguridad que se han comenzado a desplegar por toda la zona podría llegara identificarse a quienes arrojen basura a ese ecosistema