Las obras en la zona de Quatre Fonts de El Vendrell, nexo de unión entre el núcleo histórico y el Tancat que fue la zona de crecimiento tras la construcción del puente de França, son el punto de inflexión para un cambio de modelo urbano y de la movilidad.
Los trabajos son para la peatonalización. Ya se ha cortado la circulación de coches en el histórico puente y se ganará espacio para peatones y bicicletas. Es un punto con una concentración de historia.
Con Quatre Fonts se amplía la zona peatonal del centro. La filosofía es sacar coches del núcleo histórico como se hizo en la calle Doctor Robert. En esa calle hubo quien dudó sacar la circulación, pero ahora es un área que ha ganado en tranquilidad.
Cambios
La peatonalización de Quatre Fonts obliga a cambios de circulación. Los trabajos iniciados son en las calles Quatre Fonts y del Om (hasta la calle Cometa) y en el puente de França. Además se aprovecha para renovar infraestructuras.
El objetivo es sacar coches del centro donde en muchas jornadas la circulación es un caos. El próximo 2023 podría verse ese cambio de modelo hacia uno más sostenible y pacífico para los vecinos. Sólo las principales arterias mantendrían la circulación rodada.
Tras la peatonalización de Quatre Fonts el objetivo es avanzar hacia el puente de França y la calle Cristina Baixa, donde las aceras son impracticables. Esa calle pasaría a ser de plataforma única y peatonal ya el próximo año.
Son muchos los vecinos que la utilizan para llegar a diferentes equipamientos, pero también hay un elevado volumen de tránsito a elevada velocidad, pese a ser muy estrecha.
La Rambla
Uno de los ejes viales donde también se intentará ganar espacio para los peatones será en la Rambla, ahora con circulación en ambos lados, con una extensión para dar prioridad peatonal en la plaza Francesc Macià y el mercado municipal. En la Rambla ya el próximo año podrían hacerse pruebas de reordenación para dar prioridad a los peatones.
Sin embargo ese modelo de pacificación del centro pasa inexorablamente por la creación de aparcamientos disuasorios muy próximos a ese núcleo peatonal para facilitar el acceso a los comercios y la dinamización de toda la zona. Uno de los proyectos es en la zona del Botafoc.
En el proceso de pacificación de la movilidad en el centro de El Vendrell destaca la creación de un carril bici de 2 kilómetros que unirá diferentes centros de afluencia de personas.
El nuevo carril bici, del que ya se ha habilitado la mitad, une la estación de tren y con ello la de autobuses y la Rambla, con la zona escolar donde se concentran colegios e institutos y de equipamientos deportivos. El carril bici debe facilitar los desplazamientos en bicicletas aprovechando la orografía plana del municipio.
Se ha buscado unir dos centros de afluencia de usuarios. Hay tramos segregados de la acera y separados de la calzada y otros compartidos con los peatones.
Ordenanza
El próximo tramo de carril bici que se habilitará será en la zona de Jaume Carner, la principal vía de circulación del centro de El Vendrell y que es el tramo más complicado de ejecución.
El Ayuntamiento redactará una ordenanza de uso del carril bici en la que está previsto que los patinetes puedan usarlo. Ahora la norma general establece que esos vehículos deben circular por la calzada.
El carril bici también se une con la vía verde que conecta las zonas de playas con el centro histórico y que es muy utilizado. La concejal de Urbanismo, Nuria Rovira, señala que cuando esté finalizado el carril bici del centro de la ciudad, habrá todo un trazado continuo y seguro hasta las playas.
Incluso podría alargarse con las obras de mejora de la carretera de acceso al núcleo de Sant Vicenç de Calders y que realizará la Diputació.
El Ayuntamiento contempla ampliar zonas de aparcamientos de bici y modelos como los Bicibucs que se han instalado en Cunit para guardar bicicletas.