El expresidente de la Generalitat y actual líder de Junts, Carles Puigdemont, ha declarado que considera probado que Abdelbaki Es Satty, el imán de Ripoll señalado como organizador de los atentados terroristas de Barcelona y Cambrils en agosto de 2017, era confidente del Centro Nacional de Inteligencia (CNI).
“Teníamos razón: el cerebro de los atentados de Barcelona y Cambrils, un mes y medio antes del referéndum de independencia de Catalunya, tenía tratos con los servicios secretos españoles”, publicó Puigdemont en la red social X. Esta afirmación llega después de conocerse que el CNI se reunió con Es Satty en varias ocasiones entre 2012 y 2014, cuando este cumplía condena en la prisión de Castellón de la Plana, para recabar información sobre entornos yihadistas.
Teníem raó, el cervell dels atemptats de Barcelona i Cambrils l'agost del 2017, un mes i mig abans del referèndum d'independència de Catalunya, tenia tractes amb els serveis secrets espanyols. El coneixien perfectament. Sota la catifa dels secrets, l'Estat amaga molta merda.... https://t.co/fW6YqzeNvp
— krls.eth / Carles Puigdemont (@KRLS) January 13, 2025
Documentos desclasificados
Los documentos desclasificados por el gobierno español, a raíz de una demanda de Junts que fue aceptada por el PSOE, confirman que el CNI descartó a Es Satty como fuente por falta de confianza. No obstante, Puigdemont ha asegurado que los servicios secretos “conocían perfectamente” al imán y ha criticado que no actuaran de manera contundente.
“Sé infiltraron de manera indecente en el movimiento independentista, como demuestra el excelente documental de ‘La Directa’, y nos espiaron (¿nos espían todavía?) sin autorización alguna, solo para obtener información útil en su lucha contra Catalunya... pero contra el terrorismo islamista no tomaron medidas similares”, afirmó Puigdemont.
El líder de Junts expresó su indignación asegurando que la prioridad del Estado es la “unidad de la patria” en detrimento de la seguridad de las personas. “La unidad de la patria es más importante que la vida de las personas. Miserables”, concluyó.
Las declaraciones de Puigdemont reavivan el debate sobre las actuaciones del CNI y su papel previo a los atentados de 2017.
