Menos regalos para Reyes, comidas más austeras y esperar a las rebajas para ir de compras. Las familias españolas tendrán que cambiar sus hábitos estas Navidades para que las facturas no se disparen. Las subidas de los precios están afectando a los recibos de luz y gas, pero sobre todo se está notando en la cesta de la compra y los productos básicos, lo que impactará en el gasto que los hogares tengan que afrontar en sus cenas, regalos y viajes de estas fechas.
En este contexto, más de la mitad de los españoles aseguran que reducirán sus compras navideñas este año debido a la elevada inflación, según un estudio de Appinio, plataforma de investigación de mercados, que también revela que solo un 37% de ellos viajará en sus vacaciones de Navidad.
Destaca el hecho de que uno de cada cuatro encuestados (25%) asegura que dará sus regalos en enero para aprovechar las rebajas de principios de año. En cualquier caso, dos de cada cinco reconoce que las compras de regalos le causan un importante estrés por las subidas de precios.
Un informe de la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) confirma estos datos: el gasto navideño previsto suma 735 euros por persona, un 15% más que el año pasado (94 euros más), a pesar de que se realizarán menos compras y se harán menos viajes.
Suben los precios de los regalos
El presupuesto se incrementa especialmente para los regalos, de 348 euros de 2021 a los 393 de este año, no por más cantidad, sino por las subidas de los precios, según revela la encuesta. También para los viajes y vacaciones: de los 80 euros que se destinaron el año pasado, a los 101 euros de este. En cenas y comidas de amigos y compañeros de trabajo los españoles gastarán 138 euros.
Los consumidores están siendo muy prudentes en sus compras y la incertidumbre económica no ayuda a elevar las ventas. El último informe publicado por la Agencia Tributaria sobre las ventas diarias de las empresas con datos hasta el 6 de diciembre indica que la facturación aumentó casi un 10% pero no por un mayor nivel de consumo, sino por los elevados precios.
De hecho, si se deflacta el consumo, las ventas reales aumentaron menos del 2% respecto al año pasado. Y la alimentación es quien se lleva la palma de las ventas, con un incremento del 6% en precios reales respecto al mismo momento del año anterior.
Productos frescos
Y es que pese a la subida de los precios, no faltarán en la mesa productos frescos típicos de estas fechas. De hecho, el 20% del presupuesto navideño irá destinado a carne, el 15% a marisco, el 13% a pescado y un 11% a embutidos. Ahora bien, el barómetro Food 2022 de Edenred señala que el 84% de los españoles destina un mayor presupuesto a alimentación debido a la inflación, por encima de la energía (que aumenta para un 69% de los encuestados) y el transporte (40%).
Algo lógico teniendo en cuenta los precios que están marcando los típicos productos navideños en todos los mercados.
El último balance que realiza la OCU de cara a las cenas navideñas indica que las mayores subidas de este mes se han producido en las almejas (44%), los percebes, el besugo (21%) y la merluza (12%). Pero esto solo ha sido el alza de las últimas semanas, y los incrementos respecto a las mismas fechas de hace un año son más alarmantes, con la lombarda un 30% por encima de su precio de la Navidad de 2021; las almejas, un 24%, y el pavo, un 22%.
Las almejas se venden de media a 33,6 euros el kilo, un 122% más que el precio que tenían en 2017. El besugo no se queda atrás, experimentando una subida del 109% en estos cinco años hasta venderse hoy a 58,7 euros el kilo. La merluza, otro de los grandes productos de las cenas navideñas, ha subido un 47% hasta 17 euros/kilo, y eso que en el último año ha bajado un 10%. En total, la cesta de la compra elaborada con 15 productos típicos que estudia la OCU se ha encarecido un 45% en los últimos cinco años.
Los restaurantes
Además, la escalada generalizada y persistente de los precios también afecta a los restaurantes. Cuatro de cada diez establecimientos (45%) percibe menos clientes debido al aumento progresivo de la inflación.
Frente al espíritu consumista de estas fechas, es clave destacar cómo están surgiendo nuevos hábitos en las compras no solo vinculados al precio, sino basados en la sostenibilidad. El último informe de la consultora EY indica que este año los factores ecológicos son determinantes con una población cada vez más concienciada.
Así, siete de cada diez encuestados afirman estar «profundamente preocupados» por la fragilidad del planeta y piden medidas medioambientales. En sus actos, afirman que reducirán la cantidad de luces de Navidad o los envoltorios de los regalos.
Peor situación financiera
El mes de diciembre se ha convertido en uno de los periodos de mayor actividad para las compras. El gasto en regalos, ocio, restauración, viajes o alimentación se incrementa en estas fechas, dando lugar a un importante aumento del presupuesto familiar.
Un desembolso extra que, debido a la coyuntura económica actual, hace que muchos hogares no sean capaces de asumir. Especialmente, teniendo en cuenta que hay un elevado porcentaje que ha visto cómo sus finanzas personales empeoraban en los últimos meses.
Así lo refleja el Informe Europeo de Pagos de Consumidores de Intrum, del que se desprende que el 52% de los españoles afrontarán estas navidades con una situación financiera peor a la de hace un año. Esta cifra, aunque es elevada, situaría a la población de nuestro país por debajo de la media de Europa. Tal y como muestra el estudio, el porcentaje de europeos que reconoce que su bienestar económico ha empeorado en los últimos doce meses es del 59%, siete puntos por encima del promedio español.
En concreto, España se encontraría en el sexto puesto por la cola, por encima de Dinamarca (50%), Noruega (50%), Finlandia (49%), Suecia (47%) y Suiza (46%). Pese a esta ventaja, los españoles están en el grupo que más deudas contraen en Navidad. Según el estudio de Intrum, el 24% de los consumidores nacionales reconoce que suele endeudarse en exceso durante las fiestas comprando regalos y alimentos, mientras que la cifra europea baja al 16%, ocho puntos menos. La razón, tal y como indican, es cumplir tradiciones y mantener a la familia unida, entendiendo este gasto como un «deber».
Este comportamiento podría ocasionar que muchos hogares recurran a pagos aplazados o créditos que supongan un riesgo para la sostenibilidad de su economía, advierte el informe. De hecho, este análisis muestra que el mismo porcentaje (24%) espera estar más endeudado que nunca al final de las celebraciones navideñas, cifra que supera en tres puntos a la media comunitaria (21%).