La portavoz del PSC, Núria Parlon, ha afirmado este lunes que la prioridad de los socialistas es liderar un Govern tripartito con ERC y los comuns. Los socialistas rechazan rotundamente investir al candidato de JxCat, Carles Puigdemont, a pesar de sus «amenazas de bloqueo» al Gobierno de España.
En una rueda de prensa posterior a la reunión de la dirección del partido, Parlon ha explicado que ya han formado su equipo negociador, encabezado por la número dos del PSC, Lluïsa Moret. La portavoz ha anunciado que inciará las conversaciones con todos los partidos, excepto Vox y Aliança Catalana.
«No daremos apoyo a la investidura de Puigdemont, la ciudadanía ha hablado claro y el independentismo en este momento no tiene una mayoría legítima como para reclamar este Govern encabezado por Carles Puigdemont», ha remarcado.
«Esto le tiene que quedar muy claro a Puigdemont, aunque nos amenace con bloquear la gobernabilidad en España», añade Parlon.
Los comuns reman por el tripartito
El portavoz de los Comuns en el Parlament, David Cid, ha expresado la voluntad de su formación de negociar un acuerdo entre los partidos de izquierdas para formar un tripartito con el PSC y ERC. La formación de Albiach pone como prioridad llevar a cabo políticas progresistas como, por ejemplo, las de acceso a la vivienda.
David Cid ha expresado su preocupación por los problemas de Rodalies y ha advertido de que mejorar este servicio ferroviario tiene que ser una prioridad para todos los partidos. Además ha apuntado que para llevar a cabo políticas progresistas debe haber «un gobierno de izquierdas en Cataluña».
Ha señalado, al respecto, que los Comunes trabajarán para que este gobierno de izquierdas sea una realidad, ya que con los resultados electorales sólo hay tres escenarios posibles: el tripartito de izquierdas PSC-ERC-Comunes, un «gobierno sociovergente» PSC-Junts o la repetición de los comicios.
«Tenemos voluntad de negociar un acuerdo» con PSC y ERC, ha indicado David Cid, que ha constatado que «ahora no hay una mayoría independentista en el Parlament».
ERC quiere estar en la oposición
Mientras comienzan las conversaciones para investir a un nuevo President, el líder de la Generalitat en funciones, Pere Aragonès, ha anunciado este lunes que abandonará la primera línea política y no recogerá el acta de diputado.
La debacle de ERC en las elecciones al Parlament, ha llevado a los republicanos a retroceder 13 escaños, hasta quedarse con 20.
En una rueda de prensa en la que ha comparecido en solitario, tras una reunión de la permanente nacional de la formación, Aragonès ha dicho que ha tomado esta decisión por «responsabilidad y honestidad» y que ahora iniciará «una nueva etapa».
Aragonés ha remarcado que los resultados del 12M han dado lugar a un «cambio de rasante» en el que el independentismo ya no suma una mayoría parlamentaria y Catalunya ha dado «un giro hacia la derecha».
Preguntado sobre los próximos pasos de ERC, Aragonès ha defendido que los republicanos serán un «elemento de desbloqueo» y pasarán a la oposición, puesto que les toca a PSC y Junts «entenderse y gestionar la situación».
«Oposición es oposición», ha remarcado, asegurando que no «estaremos para facilitar una investidura del PSC y no participaremos de operaciones que necesitan del acuerdo de Junts y PSC».
