Las personas que el pasado martes pasaron a primera hora entre las 8 y las 9 de la mañana por la Rambla de Sant Jaume dels Domenys se sorprendieron al ver una cama.
¿Qué hacía allí? Además del somier y el colchón una alta banderola aireaba la pregunta ‘Sant Jaume dels Domenys, poble dormitori?’
La respuesta estaba sobre el colchón en forma de códigos QR que una vez escaneados, aclaraban las dudas.
Nunca ha sido dormitorio
El código enlaza con un documento en el que se defiende que Sant Jaume dels Domenys no es un pueblo dormitorio y que nunca lo ha sido.

La acción reivindicativa y anónima apela a los vecinos para su implicación en la vida cultural y colectiva del municipio para evitar que se convierta en un pueblo dormitorio.
La iniciativa señala que Sant Jaume es un pueblo vivo «con alma y una rica vida cultural gracias a los actos y fiestas populares». El documento muestra el listado de las entidades y cómo contactar con ellas para participar.
Llamar la atención
Por eso la cama pretendía llamar la atención de los vecinos para mantener la vitalidad en el municipio.
Los impulsores de la iniciativa piden al Ayuntamiento que vuelva a colocar la instalación donde estaba «para dar oportunidad a más vecinos para verla y reflexionar», porque no es un acto vandálico, «sino una intervención efímera con la voluntad de generar impacto y abrir un debate público y constructivo sobre el futuro de nuestro pueblo».