Un tramo de la AP-7 en Tarragona, el más peligroso para conducir de noche

Los accidentes suelen producirse al inicio o al final de la noche, pero proporcionalmente los más letales se registran entre las 3 y las 5 de la mañana

Falta de visibilidad, deslumbramientos y somnolencia son los mayores temores de los españoles cuando conducen de noche, según un estudio que alerta del peligro de ponerse al volante en esas horas del día: 6.500 muertos en 276.000 accidentes nocturnos con víctimas en la última década.

Son algunas de las conclusiones del estudio 'Conducción nocturna: riesgo, accidentalidad y percepción de los conductores españoles (2013 – 2023)', de la Fundación Línea Directa, hecho público este martes, según el cual el número de fallecidos se ha incrementado en más del 24 por ciento entre ambos años, y solo en 2023 alcanzó la cifra de 641.

El informe pone también de relieve la mayor letalidad de los accidentes nocturnos, un 55 por ciento más de fallecidos que los siniestros diurnos y un 10,5 por ciento más de heridos graves en proporción.

La víctima más habitual en estos siniestros nocturnos es un hombre de 38 años de media, con casi 20 años de experiencia al volante, que conduce un turismo de entre 10 y 15 años de antigüedad y que sufre el accidente en vía urbana.

Los accidentes suelen producirse al inicio o al final de la noche, pero proporcionalmente los más letales se registran entre las 3 y las 5 de la mañana.

El 10 por ciento de los fallecidos en accidentes nocturnos dieron positivo en alcohol.

Por ello la directora general de la Fundación Línea Directa, Mar Garre, ha hecho en la rueda de prensa de presentación de este informe una llamada de atención a todos los conductores ante las próximas fechas con muchas horas de ocio y celebraciones como las fiestas navideñas para que recuerden que el alcohol es incompatible con ponerse al volante.

Los mayores temores de los españoles cuando conducen de noche con la falta de visibilidad, los deslumbramientos y la somnolencia, según una encuesta realizada para completar el estudio.

Destaca que 1,5 millones de conductores (el 5 por ciento) afirman haber sufrido un accidente por la noche y casi el 20 por ciento aseguran haber estado a punto de tenerlo, mientras que más de 10 millones (el 39 por ciento) reconocen haber dado 'cabezadas'.

Entre las soluciones que proponen los ciudadanos destaca mejorar la iluminación de las vías convencionales (68 %) y prohibir a ciclistas (37 %) y peatones (24 %) circular por vías interurbanas de noche.

Los tramos más peligrosos de España para conducir de noche lo encabezan la AP-7, en su paso por Tarragona (km 328-345), que concentró 18 fallecidos; la N-340, en Castellón (km 1028-1043), con 13 muertos, y la A-7 en Málaga (entre los kilómetros 167 y 177), con 11 víctimas mortales.

Las comunidades autónomas con mayor proporción de accidentes mortales ocurridos por la noche son Navarra, Castilla y León y Castilla-La Mancha. En el otro extremo se sitúan Madrid, Catalunya y País Vasco.